La droga del poder

Señor director:

Indudablemente, desde el surgimiento de las nociones políticas nacionales, el poder se ha convertido en una droga para los gobernantes. La reeleción y el derrotero político dominicano se han convertido en variables dependientes para las elecciones del 2016. La cadena reelecionista se ha convertido en un problema propio de los dirigentes, sino que, han establecido diferentes pautas para crear un efecto dominó dentro del partido en el que militan. Los hechos históricos apuntan que el problema de la reeleción surge a mediados del siglo XIX, siendo Buenaventura Báez el principal precursor. Adentrándonos ya al siglo XXI, la reelección sigue siendo un tema de discusión dentro de la geografía nacional. Leonel Fernández, ex-presidente de la República, opta por ser reelegido en las elecciones próximas. En esa misma situación se encuentra también el ex-mandatario Hipólito Mejía. La gran incógnita es quién ganará las elecciones en el 2016. El rumbo del país se encuentra atrapado en el espacio y el tiempo. Los ciudadanos de clase trabajadora piden la reeleción de Danilo, pero está prohibida constitucionalmente. Además, si el pueblo no confía en sus mandatarios, el destino político del país se encontrará frente a un callejón sin salida. Las grandes mayorías piden que Danilo se reelija. ¿Hará Danilo todas las maniobras posibles por quedarse en el poder? Estamos ya a 18 meses de las elecciones sin un rumbo claro.

Atentamente,

Francisco Carvajal

bufetecarvajalk@gmail.com

Concluye misión

Apreciado amigo:

Tengo el honor de dirigirme a usted para hacer de su conocimiento que el día 15 de marzo del año en curso concluyo mis funciones como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República del Ecuador ante el ilustrado Gobierno de la República Dominicana.

Por ello, deseo transmitirle mi sincero agradecimiento por el valioso apoyo y las reiteradas muestras de amistad que tuvo a bien dispensarme a través del medio que usted dignamente dirige, con una amplia difusión de las actividades entre nuestros países y que permitió estrechar aún más las cordiales relaciones bilaterales.

Hago propicia la ocasión para reiterar a usted, señor Director, el testimonio de mi más alta y distinguida consideración, así como mi aprecio personal.

Cordial abrazo,

Carlos López Damm,

Embajador