Contaminación sónica
Señor director:
El departamento Antirruidos de la Policía Nacional se incautó en apenas siete días de 548 bocinas y más de 300 cajones y retuvo 108 vehículos de personas que causaban ruidos y tocaban música con un volumen muy alto. La mayor cantidad de incautaciones se llevó a cabo en el mismo centro del Distrito Nacional, seguido de Santo Domingo Este, Los Alcarrizos, Villa Mella, y Santiago.
La labor del departamento antirruidos es extraordinaria a pesar de que prácticamente trabaja sin recursos, sin vehículos, con pocos hombres y muchas exigencias.
El problema de la contaminación sónica no es exclusivo de la Policía Nacional, sino, de todos los actores que tienen que ver con la preservación de la salud, el medio ambiente y la seguridad ciudadana.
Cuando alguien llama a través del Sistema Nacional de Emergencia y Seguridad 9-1-1, para denunciar un caso de ruidos, o de contaminación sónica, deben acudir los representantes de la seguridad pública, generalmente uno o varios agentes del cuerpo del orden.
Pero cuando se trata de una vivienda de un militar o alto funcionario del Gobierno, las cosas no funcionan, y si se trata de un centro de diversiones propiedad de un potentado, las cosas funcionarán mucho menos.
Basta darse una vuelta en horas de la madrugada por los bares, discotecas, centros nocturnos y otros para que se vea como muy pocos respetan el horario establecido para esos lugares donde se vende alcohol. Muy pocos respetan ese horario.
Muchos bares, discotecas y centros de diversiones alegan que califican para estar abiertos hasta las 3:00 de la madrugada sin importar el día. Y no pasa nada.
El sector de Villa Juana es un buen lugar para comprobar que el horario para la venta de alcohol es letra muerta y que los establecimientos que tocan música alta hasta muy entrada la madrugada son clase aparte y por lo tanto intocables.
Apoyemos todos el departamento antirruidos de la Policía que tan excelente labor realiza, porque en definitiva es al ciudadano a quien beneficia un buen entorno ambiental no sólo con cero basura, sino también con cero ruidos. Quiera el Señor que las cosas sigan marchando bien en el departamento Antirruidos de la Policía Nacional
Atentamente
Ruddy Germán Pérez
periodista