Estados Unidos ha condicionado su colaboración con el nuevo primer ministro haitiano a que se implementen mecanismos en el Consejo Presidencial de Transición para la rendición de cuentas.
Es verdad que se necesita transparencia para elevar el crédito del organismo, pero con la inestabilidad e incertidumbre que sacude a la nación es casi lo de menos.
Puedes leer: Reenvíos
Haití lo que más necesita ahora mismo -y el canciller estadounidense, Antony Blinken, lo sabe muy bien- son más soldados, equipos bélicos y recursos para lidiar con las pandillas que aterrorizan a la nación.
En su reciente visita a Haití, Blinken se comprometió con unos aportes económicos para mitigar las penurias y respaldar a las tropas internacionales, lideradas por Kenia, que tratan de ayudar a implantar el orden y la seguridad. El ataque a aviones y otros sucesos exigen más colaboración con ese país.