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Hace aproximadamente tres años, los amanuenses y servidores a sueldo de la USAID, algunas y algunos de los que ejercen el llamado periodismo de investigación, la emprendieron contra el autor de esta columna, haciendo públicas acusaciones difamatorias y calumniadoras, que señalaban supuestos actos de corrupción y prevaricación cometidos en el ejercicio de las funciones que hemos ejercido desde el advenimiento al poder del los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana.

Pasaron por alto, ex profeso, que obtuvimos en octubre del año de 1960 el título de Doctor en Derecho de la Universidad de Santo Domingo, junto a docenas de compañeras y compañeros, la inmensa mayoría de los cuales se han despedido de la vida.

speramos frente a esas acusaciones ser llevado a los tribunales de la República, como debe ser cuando las pruebas de esas acusaciones sean realmente validas.

Advertimos en el seno del Comité Político, al compañero Leonel Fernández, que esas acusaciones eran el inicio de un plan puesto en ejecución por los amanuenses de la política regional de los Estados Unidos en nuestro país, que tenía como objetivo desacreditarlo y que luego seguiría en contra de otros compañeros y en contra de quien es en este momento Presidente de la República el compañero Danilo Medina, y se extendería también a la organización concebida, fundada y organizada por Juan Bosch, que ha recibido el importante apoyo de la mayoría de nuestro pueblo, por la ejecución en los diferentes gobiernos que se han sucedido de importantes obras y el reordenamiento de la administración pública de nuestro país.

Ya hace tiempo que nuestra persona fue excluida de esos ataques difamatorios y calumniadores, ahora se dirigen no solamente a nuestro compañero presidente de la República y a otros compañeros que son sus colaboradores más cercanos y en términos generales a todo lo que tenga relación con el PLD.

En la realidad de los hechos los gobiernos peledeistas no han sido ni son bien vistos, por los responsables de crear la política de la poderosa nación que aun hoy, todavía, se cree la dueña absoluta de los destinos de los pueblos de esta América nuestra como la llamó, José Martí. Por suerte para los dominicanos las organizaciones y los llamados dirigentes que se oponen a nuestro gobierno y que andan cogidos de la mano del representante como embajador del Sr. Obama y del gobierno de su país, no pasan de ser principiantes en el ejercicio de ese oficio o profesión, tan difícil, que es la política.

Al comenzar el año queremos llamar la atención nuevamente a nuestras compañeras y nuestros compañeros para que recuerden y tengan presente como hemos dicho en múltiples ocasiones que “La Pelea es Peleando” y que se dejen de estar en actitudes de condescendencia y queriéndose hacer los simpáticos, con una caballería de calumniadores difamadores y mentirosos que se sienten protegidos y respaldados no solamente por la persona que representa aquí al presidente de los Estados Unidos, y de otros pseudos diplomáticos quienes están todos organizados en las filas de esa maquinaria de destrucción de la soberanía y la dignidad de nuestro pueblo.

Si en el PLD algunas compañeras y compañeros ponen atención y le dan crédito a todos los chismes, mentiras y disparates que se publican en los diferentes medios de comunicación, escrito, radiales y televisivos, terminaremos siendo víctimas y con nosotros caerá para siempre el pueblo que está obligado a servir, proteger y defender.