Opinión

CUANDO SEA PRESIDENTE

CUANDO SEA PRESIDENTE

Con vuestra anuencia trataré hoy asuntos personales. Aunque lo que les contaré hará ver que soy, aparentemente, buena persona, les pueden servir de ejemplo. Violando la ley (pues oriné en la calle), antes de empezar a trotar, tomé un recodo en la parte interna de la cerca de los parqueos del estadio “Quisqueya”, y mientras lo hacía aprecié que había dos botellas rotas conteniendo agua, y aunque me resulto difícil las volteé para que así no se reprodujese el mosquito Aedes Aegyti que transmite el Dengue. No vivo por ahí, no ha de afectarme que ahí se reproduzca el mosquito, pero ¿y los demás?¿Los que son mis prójimos?

Unos pocos metros después, ya trotando sobrepasé una cáscara de guineo, no corría riesgo de pisarla y probablemente resbalar y caerme, sabe Dios con qué consecuencias, pero volví a pensar en los que podrían venir detrás de mí y no la verían, y me devolví a recogerla.

La más de las veces que troto en la madrugada es en la periferia del Centro Olímpico y hay un joven que dado el mal estado de la acera de la Kennedy, se tira a la calle, y eso es peligroso, pues cualquier pérdida de control del vehículo por parte de un conductor de los que vienen a toda velocidad por el elevado en sentido oeste-este, puede aproximarse a la acera y atropellarlo, aceleré un poco mi marcha y se lo hice saber. Me hizo caso.

Un amigo común me hizo saber la preocupación de la ministra de salud en torno a los bajos ingresos que tiene el ministerio. Dada la condición de amistad y lealtad a doña Taty, me asigné la tarea de sugerirle 10 fuentes de recursos con la escasa información a que tengo acceso y se las lleve a su despacho manuscrito y digitado. No me garantiza ni empleo ni ventajas de negocios con Salud Pública, es en la misma onda de quitar el agua de las botellas, retirar la cáscara de guineo y advertirle del peligro al corredor.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación