Los líquenes y su papel
Esas plantas consideradas por muchos como rastreras sin importancia vegetal tienen unas funciones que asombrarían a muchos mortales que no entienden el papel que estas juegan en el proceso de vida de todos los seres humanos. Los líquenes tienen un importante papel como bioindicadores de lectura inmediata de la contaminación medioambiental, de los cambios climáticos y de la estabilización del suelo. Se han realizado muchos trabajos acerca de este tema en regiones templadas, pero tan solo en algunos pocos casos las técnicas empleadas en este tipo de estudios han sido utilizados en los trópicos. La mayor parte de las investigaciones realizadas en los trópicos hasta la fecha, se relacionan con la contaminación ambiental y perturbaciones forestales, pero estas han sido ejecutadas tan solo en algunos pocos lugares, y permanecen aún sin realizar en la mayoría de las regiones tropicales.
Las ventajas que poseen los líquenes para ser utilizados como bioindicadores de lectura inmediata en los trópicos se basan en que los trabajos pueden ser realizados sin la identificación total de las especies involucradas, y en el hecho de que son perennes y fácilmente discernibles a simple vista o con la ayuda de una lupa de campo.
Los líquenes no son organismos individuales sino asociaciones mutualistas entre hongos y algas (o cianobacterias), que pueden funcionar en la naturaleza como una unidad. Típicamente los tejidos del hongo rodean al alga (o cianobacterias) fotosintética, y es la relación entre esta pareja lo que determina el tipo de desarrollo: en forma de costra (crustáceo), en forma de hoja (foliáceo), o de diminuto arbusto (fruticuloso). Con relación a su nomenclatura, los nombres científicos que se aplican a los líquenes se refieren exclusivamente al hongo, y la clasificación de los hongos formadores de líquenes (liquenizantes) se encuentra hoy en día bien integrada con el resto de los hongos; las algas y las cianobacterias llevan nombres científicos separados.
La contaminación se define operativamente en términos de concentraciones por encima de los niveles aceptados por la ley. Las técnicas para valorar la contaminación son costosas, por lo que la utilización de líquenes como biomonitores se generaliza cada vez más. Éstos permiten una medición inmediata de los niveles de contaminación en grandes áreas y, por lo tanto, actúan como señales de alarma.
Sin embargo es importante comprender que los líquenes nunca podrán reemplazar totalmente a los equipos técnicos que miden contaminación ambiental. En Nuestro país no se realizan estudios destinados a dar alarma sobre estos bioindicadores solo ahora que nos hemos dedicado a realizar investigaciones con estos fines encontramos que muchos datos arrojados por mineras son falsos pues cuando analizamos el sistema de vida de los líquenes nos damos cuentas de que las mineras han acabado con estas plantas, lo cual nos indica algo serio para la vida cercana a las mineras.