
Sergio Vargas al ser reconocido por el Concejo Municipal y la Alcaldía de Santiago de los Caballeros como “Hijo Adoptivo de Santiago”, durante el develizamiento de su figura en el primer mural en honor al merengue.
Sergio Vargas lamentó que la vieja generación de merengueros esté aguantando como un junco bajo el agua, esperando que la nueva generación asuma las riendas del merengue.
“Para que la revolución que debe afectar positivamente al merengue llegue y cumpla su rol histórico tienen que ser los jóvenes que se empoderen”, dijo.
“Cuando veo jóvenes en los bailes bailando con ese gusto, me pregunto ¿Cómo es posible que el merengue que ha sido la punta de lanza para promover una cultura tan noble y tan joven como la dominicana hoy esté en decadencia? Debemos cuidarlo todos. No debe ser una postura de Johnny Ventura, Fernando Villalona, o de un grupo de gente que ya jugamos nuestro papel histórico”, declaró el popular director de orquesta.
Sergio rechazó que se culpe a los viejos robles del merengue de no ofrecer oportunidades a los nuevos talentos para que resurja una generación provocadora de un cambio en el género musical dominicano.
“Eso es falso de toda falsedad. ¿Y la responsabilidad que tienen las autoridades que no obligan a los medios a poner la música dominicana? ¿Dónde está el movimiento de baladistas tan exitoso que se armó en los años 80? Si no hay voluntad política a través de la inversión pública estamos entreteniéndonos con mentiras”, aseguró.
Dijo que no se trata de echarle la culpa al Estado, ya que es una responsabilidad de todos: los medios, los musicalizadores y recordó que en los años 90 hubo una revolución en la radio dominicana, “a través de la cual los empresarios quisieron adueñarse de los medios y sacaron la música: Políticos que ahora son empresarios y empresarios que ahora son políticos. Han jodido todo, esa es la verdad”.
Para paliar un poco la poca difusión del merengue en la radio, Sergio entiende que el Estado debe obligar a que se difunda el ritmo y que no lo saquen de las programaciones.
“Que los merengueros no tengan que ir de rodillas a que le pongan un disco en las emisoras. Y hasta hay algunas que no quieren ponerlos ni pagándoles”, reveló.
Al proponer la obligatoriedad de difusión de música dominicana en las estaciones radiales le recordamos que directores de emisoras sostienen que sería una decisión inconstitucional.
“¡Ah, pues la violentan en Estados Unidos, y en Europa! ¿Y los valores de la Patria, quién los va a cuidar? No es obligarlos, es que la radio tiene que colocar la música nacional. En Argentina no ha muerto el tango, en Colombia, el vallenato y la cumbia se han cuidado tanto que son artículos de lujo para la promoción de esa nación hoy en día”, concluyó.