Un ministro a tiempo completo
Desde la fundación misma de la República, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones ha sido uno de los más importantes del gabinete, porque como su mismo nombre lo indica, es la dependencia encargada de la ejecución de las obras físicas que el Gobierno construye a nivel nacional, salvo que haya otra oficina encargada de la misma.
Y por eso nos complace destacar la gran tarea que está realizando al frente de la misma el licenciado Gonzalo Castillo, un hombre que goza de la absoluta confianza del Presidente Danilo Medina, hasta la fecha el mandatario que mayor aceptación popular ha concitado a lo largo de su ejercicio, próximo a cumplir cuatro años.
Hace un tiempo no muy lejano en que la entonces Secretaría de Obras Públicas había llegado a extremos de descrédito tales, que había dejado de sujeto de crédito en el comercio local, porque la mala paga era la regla no la excepción y las obras se asignaban por claro favoritismo político o afán de lucro de ciertos jerarcas de la misma, cuando no iban a parar al bolsillo de ciertos pejes gordos de la dependencia.
Bajo la autoridad del licenciado Castillo, los contratos se manejan con absoluta imparcialidad, y los fondos se asignan con absoluta pulcritud.
Por eso nada tiene de extraño que en este período de Gobierno, el Ministerio de Obras Públicas esté realizando la mas extraordinaria y fructífera labor de toda su historia, y el número de trabajos en ejecución no tiene parangón. Ahora mismo se está realizando simultáneamente una serie de obras públicas en esta capital y pueblos del interior, que por su magnitud y la inversión no tienen comparación, entre las que cabe citar la gigantesca avenida de Circunvalación, para unir la autopista Duarte, cerca del kilómetro 26, con el puerto de Haina, pasando por el aeropuerto internacional Dr. Joaquín Balaguer, la autopista de Las Américas y convirtiéndose en una vía vital para el desahogo del tránsito vehicular entre las tres regiones naturales en que el país se divide. También citaremos el paso a desnivel, para desatar el nudo gordiano que significa el cruce de las avenidas 27 de Febrero e Isabel Aguiar, en el sector de Herrera, así como otras autovías en la zona oriental, el Cibao, el Sur y la Linea Noroeste.
Ahora las cubicaciones se pagan puntualmente, lo que ha llevado a la clase ingenieril del país a la mejor etapa de su historia, porque una nueva mística se ha imbuido en su personal a todos los niveles, ya que la responsabilidad y el cumplimiento son exigidos sin contemplaciones ni amiguismos, porque el licenciado Castillo predica con el ejemplo. Igualmente se paga con puntualidad a los dueños de los terrenos que son declarados de utilidad pública por el Poder Ejecutivo para la ejecución de determinadas vías, mientras se ha dispuesto un servicio de emergencias, las 24 horas del día, para que personal y vehículos del Ministerio de Obras Públicas, vayan en ayuda de los automovilistas que se accidentan o sufren cualquier otra eventualidad.
Y hasta el próximo Domingo, con más Jerez y más Whisky..