SANTIAGO.- La Iglesia Católica consideró que con el incremento de los hechos de violencia en el país malos dominicanos le han robado la paz y la tranquilidad a las comunidades y al pueblo. La consideración está contenida en el editorial del semanario Camino, vocero escrito de la Iglesia Católica, editado por el Arzobispado de Santiago, que en reiteradas ocasiones ha expresado su preocupación por el auge de la violencia en la provincia cibaeña y el país.
“Estamos conscientes que a nivel de pueblo hemos palpado un crecimiento de los hechos violentos y que malos dominicanos les han robado la paz y la tranquilidad a nuestras comunidades, cometiendo acciones vandálicas que no veíamos por estas tierras”, subraya en comentario con motivo de la celebración de la Navidad.
Dice que duele comprobar que mientras hay millones de dominicanos que van dejando huellas de compromiso y entrega callada en favor de los más pobres “algunos maquinan el mal haciendo un ruido tan fuerte que da la impresión de que todo se ha perdido y que estamos en un callejón sin salida”.
En el editorial títulado “Feliz Navidad”, la Iglesia pide que se dé paso a una nueva vida y ser consciente de que es mucho más la luz que la oscuridad y que existen motivos y razones para ir por los caminos pregonando que vendrán días mejores “y que tenemos las fuerzas necesarias para edificar una nueva casa para cobijar la ternura y el compartir”.
Puntualiza que a nivel personal muchos en este año que termina habrán sentido la carga insoportable del abandono y la incomprensión, mientras que otros habrán experimentado la soledad que lleva al aislamiento donde parece que ninguna puerta se abre a la felicidad.
Camino estima que Jesús transforma la realidad de la humanidad “haciéndonos hombres y mujeres nuevos, constructores de una sociedad llena de fraternidad”.
“Él es nuestro motivo para contagiar a los demás con la alegría profunda que nadie podrá arrebatarnos, y que tantos buscan y anhelan encontrar”, precisa el editorial que, dice esperar que los buenos deseos y sentimientos que florecen en cada persona en estos días del año, se mantengan para siempre.