
La jinete dominicana Stephanie Engstrom acaricia a su caballo Disaronno, una muestra de la gran conexión que ambos han desarrollado.
“Sin esperar nada, encontré todo en él”, esa fue la sensación de Stephanie Engstrom en su primer encuentro con su caballo Disaronno.
Un animal prácticamente desahuciado, fue capaz de cambiar la vida de la deportista que apunta a ser la cara del ecuestre nacional en los próximos años.
Antes de llegar a sus manos, Disaronno vivió una historia marcada por el descuido y la ignorancia, ya que sus anteriores propietarios sin saber que era alérgico a ciertos medicamentos, le aplicaron un tratamiento que casi le cuesta la vida.
Stephanie Engstrom transforma a Disaronno, un caballo desahuciado, en un competidor élite con amor y dedicación
Las secuelas fueron devastadoras. Con un cuerpo deteriorado, prácticamente sin pezuñas y deshidratado parecía que todo estaba perdido, pero la vida le dio un nuevo camino por recorrer».
El encuentro
Un día cualquiera probando caballos para una de sus alumnas, su entrenador se lo presenta y le dice que no se le podía exigir mucho, pero si era perfecto para una principiante aprender a montar.
“Cuando subí algo hizo clic, fue algo único, luego de un recorrido de cinco minutos, mi entrenador me dijo: ese es el caballo tuyo, no hay que mirar más nada”.
Un nuevo capítulo
A partir de ese momento comenzó una nueva etapa para ambos.
Con la ayuda de veterinarios y mucha paciencia, Disaronno se fue transformando en un caballo élite de competencia.
La conexión entre Engstrom y Disaronno resalta la importancia de las segundas oportunidades en el deporte ecuestre
Fue sometido a varias rutinas de fortalecimiento muscular y sobretodo una dosis de cariño incalculable.
“Él tenía tres años sin trabajar, comenzamos en competencia este mes de febrero, no estaba al 100% pero aun así hemos ganado varias competencias, por lo que ya es necesario seguir adelante”.
Más allá del terreno
La jinete confesó que la relación con el caballo la hizo crecer como persona, por el hecho de crecer en base a segundas oportunidades,
“La conexión que tengo con él es increíble, los dos nos necesitábamos. Nos encontramos en un punto donde dependemos uno del otro y hasta el momento la vida nos ha regalado momentos muy bonitos”, indicó Engstrom muy emocionada.
Por razones económicas, Engstrom no puede costearse un “mega caballo”, pero en Disaronno ha encontrado lo que otros pagan para tener, a base de amor, trabajo y cariño.
Sobre el ecuestre RD
Para Engstrom es necesario trabajar en la educación del ecuestre y fortalecer las exigencias de la disciplina a nivel internacional y ofrecer más oportunidades de crecimiento y aprendizaje para los entrenadores.
“El simple hecho de que puedas ejecutar un ejercicio, no significa que lo estás haciendo bien para poder llegar a las pistas internacionales, necesitamos de más y mejores entrenadores para poder llegar más lejos”.
Sustento
Engstrom tiene compitiendo seis años a nivel internacional, pero confiesa que no ha sido fácil, debido a lo costosa que es la disciplina.
“Necesito el apoyo de todas las entidades deportivas para poder llegar más lejos, tengo la disciplina y el amor por el deporte que hace falta para poner la bandera en alto”.
Un solo enfoque
Engstrom actualmente participa en el Small Tour en la zona de Florida, Estados Unidos, en donde se realizarán una serie de competencias previo al Wellington Winter Equestrian Festival 2026.