La señora Agripina Martínez junto a sus hijos Brayan Martínez, estelar jugador de basket y las hermanas Brayelin y Jineiry, destacadas atletas de las Reinas del Caribe.
Las madres bendecidas con la dicha de tener hijos dedicados al deporte y que han participado en competencias nacionales e internacionales, han sido un gran soporte para que sus hijos no pierdan la ilusión de ser grandes atletas.
Son muchas las madres dominicanas que han contribuido para que sus hijos atletas logren grandes hazañas.
Conozco a muchas madres que se han sacrificado para que sus hijos triunfen en los deportes. No daré nombres, pero conozco muchos casos de madres solteras que trabajan mañana, tarde y noche para apoyar económicamente a sus hijos atletas y eso hay que valorarlo.
Se sacrifican y dejan todo para que sus hijos sean excelentes atletas. Trabajan y se entregan para tener atletas con valores.
Puedes leer: ¿Quién dijo miedo?: Madres que facturan al volante
Se desvelan para que sus hijos alcancen la cúspide como atletas. Viven sus triunfos y sufren sus derrotas. Así son las madres. Las madres siempre serán el mejor referente para que sus hijos nunca pierdan la esperanza de alcanzar el éxito. Ellas son un ejemplo para que los atletas observen una buena disciplina.
Educan para que sus hijos sean atletas dignos y los orientan para que sepan que lo primero es estudiar. Ellas siempre quieren que sus hijos sean buenos seres humanos. Las madres merecen medallas de oro y ser llevadas al salón de la fama. Las madres nunca tienen vacaciones para sus hijos atletas. Siempre están dispuestas para ayudarlos en todas las circunstancias.
Las madres son las mejores aliadas de los atletas. Son sencillamente seres especiales. Esperan a sus atletas con los brazos abiertos cuando pierden. Las madres siempre piden a Dios que cuide a sus atletas.
La madre
Soy un fiel creyente de la importancia de las madres para conducir a sus atletas por el camino correcto. Juegan un papel preponderante para que los atletas nunca pierdan su norte. Ellas son consagradas en el cuidado de sus hijos.
Son capaces de realizar toda clase de sacrificio para proporcionar a sus hijos atletas toda la ayuda posible, contar de verlos realizar sus sueños.
Hoy celebramos el “Día de las Madres”, pero sabemos que cada día en nuestras vidas es también el día de las madres, porque son merecedoras de lo mejor que podamos brindarles porque su amor por nosotros no tiene pausa, ni condiciones. Hoy y siempre que puedan los atletas deben llevar flores a sus madres y jamás olvidarse de las que ya están en el cielo.
Qué grande es el amor de madre.
¡Felicidades!
Hasta mañana, si Dios quiere. dominicanos.