DAJABON.- Miles de haitianos que no pudieron acogerse al Plan Nacional de Regularización de Extranjeros continúan regresando hoy a su país a través de la frontera, llevando consigo sus propiedades, incluyendo bicicletas, motocicletas, muebles, electrodomésticos y otras propiedades.
Algunos haitianos dijeron que preferían regresar voluntariamente y “no esperar a que los apresaran y los deportaran sin la posibilidad de regresar con sus bienes y dinero ganado durante años de trabajo en la República Dominicana”.
Los ciudadanos del vecino país que regresan son en su mayoría grupos familiares casi todos con varios niños, que residían en Santiago, Mao, Moca, La Vega y otras comunidades del Cibao, donde se dedicaban al comercio y a otras actividades productivas.
Muchos de los que regresan se quejaron de que en la Dirección General de Aduanas les cobran entre mil y cinco mil pesos para inspeccionarles las mudanzas y darles el permiso de regreso a su país, lo cual calificaron como «un robo».
Se supo que quien lleva una mudanza normal de camas, muebles, televisores, neveras y estufas, deben pagar entre tres mil y cinco mil pesos, y los que sólo traen ropas y otros objetos menores entre mil y tres mil.
En tanto que los propietarios de motocicletas deben pagar entre tres y cinco mil pesos por lo que muchos optan por irse a su país sin pasar por la Aduana, cruzando el río en los lugares más bajos.
La situación en la frontera es muy tensa y se hay gran movimiento de haitianos y de dominicanos.
“Todo el que llega a República Dominicana desde Haití tiene que presentar un pasaporte visado, lo que ha creado inconvenientes porque en la mayoría de los visitantes no tienen ningún tipo de papeles.
Cierran paso
La Dirección General de Migración cerró hoy formalmente el paso fronterizo hacia República Dominicana y confirmó que a todos los extranjeros que intenten ingresar al territorio nacional, que no posean un pasaporte y una visa como establece el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros no podrán pasar.
La decisión de las autoridades dominicanas provocó protestas y discusiones ente haitianos y dominicanos, mientras el Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) reforzaba la entrada y salida hacia Haití y mantenía a sus soldados en estado de alerta ante cualquier eventualidad.
Los empleados de Migración explicaron que al vencer el plazo dado por el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, cualquier persona que entre al territorio nacional debe poseer documentos legales.
Ante esa situación las autoridades de Migración de Haití adoptaron la misma actitud, impidiendo la entrada de dominicanos que no poseen visa haitiana, y que realizan labores en distintas empresas haitianas en Juana Méndez y otras comunidades haitianas.
Las ONG
La situación en la frontera es observada por decenas de representantes de organizaciones internacionales, no gubernamentales, entidades de la sociedad civil haitiana y de República Dominicana, por varios sacerdotes jesuitas, y fundaciones de protección a los derechos humanos que se encuentran aquí.
Desde las primeras horas de la mañana decenas de haitianos, muchos con bultos y paquetes se hallaban en la parte haitiana de la frontera con intenciones de penetrar a República Dominicana a realizar distintas actividades como trabajos domésticos en empresas privadas y fincas.
UN APUNTE
Gobernación
Anoche efectivos de la Policía desalojaron las oficinas de la Gobernación, de aquí, donde cientos de haitianos esperaban para aplicar al Plan de Regularización.
Los haitianos esperaban ser inscritos a pesar de que el tiempo no era suficiente para llenar los trámites que son realizados desde hace 18 meses. Muchos de los haitianos presentes protestaron y calificaron como un atropello la actuación de los agentes policiales, quienes dijeron cumplir órdenes de la Gobernación, debido a que las oficinas serían cerradas en dos horas.
EL DATO
Un contingente de los cascos azules de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) han tenido que intervenir el puente que comunica a Dajabón y Juana Méndez, para evitar enfrentamientos entre haitianos y dominicanos.

