RAFAEL PERALTA ROMERO
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¿Es usted de los que creen… en la concordancia?.-
¿Qué tal si recordamos algunas ideas sobre la concordancia? Se trata de una condición indispensable para ser lógico en el uso del idioma. La falta de concordancia puede mostrar a quien incurre en ello, no sólo como mal hablante, sino como persona incoherente y trastornada mentalmente.
Este artículo está basado en informaciones del Diccionario panhispánico de dudas, obra de la Asociación de Academias de la Lengua Española (pág. 163). Comenzamos recordando que consiste en la coincidencia obligada de determinados accidentes gramaticales (género, número y persona) entre distintos elementos variables de la oración. Se pueden distinguir dos tipos de concordancia:
a) Concordancia nominal (coincidencia de género y número). Es la que establece el sustantivo con el artículo o los adjetivos que lo acompañan: la blanca paloma; esos libros viejos; el pronombre con su antecedente o su consecuente: A tus hijas las vi ayer; Les di tu teléfono a los chicos; o el sujeto con el atributo, con el predicativo o con el participio del verbo de la pasiva perifrástica: Mi hijo es un santo; Ella se encontraba cansada; Esas casas fueron construidas a principios de siglo.
b) Concordancia verbal (coincidencia de número y persona). Es la que se establece entre el verbo y su sujeto: Esos cantan muy bien.
Concordancia verbal en oraciones copulativas.
Uno de los que + verbo. La presencia de dos elementos en esta construcción, uno singular (uno) y otro plural (los que), hace que se vacile entre poner el verbo en singular o en plural: «Uno de los que logró llegar a la orilla […] hubo de lanzarse de nuevo al agua» (País [Esp.] 11.10.80); «Uno de los que votaron en contra fue el ex ministro sin cartera» (País[Esp.] 2.2.84).
La concordancia gramaticalmente más correcta es la que lleva el verbo en plural, pues el sujeto es, en estos casos, el relativo plural los/las que; pero se admite también la concordancia en singular. Si esta construcción forma parte del atributo de una oración copulativa y el sujeto del verbo ser es un pronombre de primera o de segunda persona del singular (yo, tú/vos), el verbo de la oración de relativo debe ir en tercera persona, preferentemente del plural, aunque también se admita el singular: «Yo era uno de los que pugnaban para que la Basílica se constituyera en diócesis autónoma»(Proceso [Méx.] 3.11.96); «Yo fui uno de los que besó su mano» (Serrano Dios [Col. 2000]); no es correcto poner el verbo en primera o segunda persona del singular: «Vos eras uno de los que estabas con la gente que huyó» (Semana [Col.] 1-8.10.96).
Yo soy de los que, tú eres o vos sos de los que + verbo. Se trata de una construcción partitiva en la que se ha elidido el indefinido uno (soy [uno] de los que, eres/sos [uno] de los que), por lo que la concordancia se atiene a los mismos criterios expresados en el párrafo anterior así, el verbo de la oración de relativo deberá ir, preferentemente, en tercera persona del plural, en concordancia estricta con su sujeto gramatical, que es el relativo plural los/las que:
«Soy de los que piensan que solo la vida intensamente vivida merece la pena» (Rojo Matar [Esp. 2002]); menos recomendable, aunque admisible, es poner el verbo en tercera persona del singular, concordando con el indefinido elidido uno: «Yo soy de los que cree que a la historia no la para nadie» (Herrera Casa [Ven. 1985]); pero debe evitarse la concordancia en primera o segunda persona del singular: «Soy de los que pienso que este es un proceso que se tiene que hacer bien» (Vanguardia[Esp.] 18.8.94).
Es como para seguir con el tema.