Política mercadeable
Se puede contribuir a rescatar la reputación de nuestra sociedad hoy sumergida entre toda esta porquería? Creo, que algo valioso y significativo tendrá que suceder.
Sabemos, que lo que hoy esta prohibido, mañana esta permitido. Afirmación valida para los nuevos medios de comunicación, de como se delata la sociedad. La comunicación ha de acreditarse como una forma vital de la educación. Su objetivo no es dificultar la educación, sino enriquecerla.
Aun, el deprimente clima político que se registra en nuestra comunidad.
Somos, identidad, psique, emoción, pasión, rol, sentimiento, conciencia, inconsciencia, individualidad, represión, norma, originalidad, ideal, patología, biología, neurosis, espiritualidad, y un gran etcétera.
La persona formada puede echar una ojeada a las zonas del que hacer político mas banales y vulgares, y nos encontramos de manera irremediable con el poderoso caballero… que es don dinero. Que lastima. La sociedad vive, la política mercadeable depredadora de la honorabilidad de las personas.
La insistencia política actual, como demanda de campaña es patética. lo que implica, opiniones cruzadas. En ocasiones, como una ironía histórica. Son suficientes los ingredientes para ponerse a contarlos y la memoria colectiva a veces es incierta.
La política es la ciencia del desalmado, casi siempre implacable.
La ley del secreto radica en el silencio.
Yo preferiría señalar el mas intimo derecho a la reserva y el compromiso perfectamente privado para la decisión al ejercer el voto.
El criterio que planteo puede parecer egoísta, y es probable que así lo sea, es también caprichoso, por eludir cualquier supuesta obligación de hablar de quien no me apetece para prescindir de situaciones cuya descripción y relato habrían podido, resultar embarazosos, a mi juicio, para cualquiera de los candidatos, y no solo por el orden de aparición en escena, y todo aquel espectro mercadeable, también supongo la existencia de otros criterios mejores, tal vez, porque los mismos intentan ceñirse a puntos de vista mas objetivos, pero estos no son a los que suelo atenerme. Creo, por el contrario, que solo desde la mas rigurosa subjetividad cabe decidir que nos gusta y que no. Nada mas importante que la real transparencia.