Las pruebas nacionales que ha resucitado el Ministerio de Educación para este año serán la mejor evaluación del desempeño del calendario escolar.
El año se inició en la modalidad virtual, pero en la medida que bajaron los contagios de la covid se dispuso el método presencial. En sí puede hablarse de una combinación de las dos modalidades.
Lo que está por ver es si los estudiantes aprovecharon la enseñanza virtual como para someterse a la evaluación de las pruebas nacionales, que estuvieron suspendidas durante dos años.
Ya estudiantes han protagonizado movilizaciones en contra de la convocatoria alegando que la enseñanza virtual fue un fracaso. Saben por qué lo dicen.
Las pruebas, que evalúan tanto a los estudiantes como a los profesores, se supone que han sido debidamente sopesadas por las autoridades educativas.
Además de las lecciones los estudiantes y profesores tuvieron que aprender a manejar las herramientas tecnológicas. Si no se dan todas las condiciones para los exámenes se debe buscar una salida que no perjudique a los estudiantes por no alcanzar el nivel de aprendizaje requerido para la promoción de curso.
