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Régimen parlamentario

Régimen  parlamentario

Sede del Congreso Nacional

Democracia, institucionalidad, soberanía, pluralidad, libertad, independencia, parlamento… Expresiones, enunciados que encierran conceptos que van tomados de la mano.

Sectores políticos y sociales, figuras y personalidades, entre los que me incluyo, plantean su queja de que en nuestro país existe un régimen presidencialista, queriendo significar, con justa razón, que cual que sea el representante del Poder Ejecutivo, el Presidente de la República, concentra, ejerce, demasiado poder.

Más, mucho más del que debiera. Con todo su lastre para la institucionalidad y la buena y sana convivencia política, social y democrática de la nación dominicana.

Sin embargo, si escudriñamos bien, si analizamos bien la constitución de la República, pudiéramos caer en la cuenta de que más que un régimen presidencialista, pudiéramos tener una especie de régimen parlamentario. Un gobierno democrático parlamentario. Esto sin la necesidad de que exista un primer ministro como jefe de gobierno.

Siempre se ha dicho, y así lo creo, que el Parlamento, el Congreso Nacional, Cámara de Diputados y Senado de la República, en esencia, es el ente medular de la democracia. Es, en teoría, el Primer Poder del Estado. Quienes lo integran, diputados y senadores, están llamados a llevar todo esto a la práctica, a la realidad.

He dicho y escrito en otras ocasiones, y lo reitero, que de nuestros Poderes del Estado, al Congreso Nacional lo tienen como a la cenicienta. Lo vilipendian por aquí, lo zarandean por allí, lo estrujan por acá.
Por la actitud, por el accionar, por la conducta de uno, de dos, y ni siquiera de tres o cuatro, podemos juzgar a un colectivo tan amplio, podemos juzgar a la institución.

He visto y sufrido como nuestros legisladores regularmente no asumen su propia defensa como debieran. Es por ello que recibo con gran beneplácito y aplaudo la actitud, la disposición del nuevo presidente de la Cámara de Diputados, el profesor Radhamés Camacho Cuevas.

En uno de los tramos de su discurso de juramentación el pasado 16 de agosto, Camacho adelantó que ejecutará un programa comunicacional tendente a resaltar la labor legislativa y la buena imagen de la Cámara de Diputados. Lo aplaudo.

“Entre mis planes, junto a los equipos y expertos en materia de comunicación que tiene la Cámara de Diputados, diseñaremos una estrategia de comunicación directa que le diga a la ciudadanía que aquí hay legisladores y legisladoras con formación de tal diversidad, como médicos, ingenieros, profesores, abogados, economistas, expertos en administración pública y privada, periodistas, comerciantes y líderes religiosos, entre otras; así como gremialistas, como los defino yo, hombres y mujeres que han dedicado sus vidas al trabajo y que, política y socialmente su accionar gravita e impacta en todo el territorio nacional”.

Agregando a renglón seguido, que una de sus primeras acciones estará dirigida a optimizar ¨cada una de las comisiones y repotenciar en la exposición pública a los líderes legislativos que las dirigen, como efectivamente acontece en los más importantes parlamentos del mundo. Las comisiones, sus decisiones y sus miembros también serán noticia¨.

Todo esto, sin que nada vaya en desmedro del rol constitucional que están llamados a cumplir nuestros congresistas: legislar, fiscalizar y representar.

En su discurso de rendición de cuenta el pasado mes de Septiembre, el presidente del Senado, doctor Reinaldo Pared Pérez, manifestó: “Cada vez que como presidente del Senado de la República y por mandato de nuestra Carta Magna, llega el momento de la rendición del Informe Legislativo, Administrativo y Financiero de este Poder del Estado, me embarga un sentimiento de orgullo, a nivel profesional y moral, pues este compromiso, además de hacerme abrazar la satisfacción que da haber cumplido con el deber, provoca en nosotros, sentimientos de respeto y gratitud hacia esta valiosa Institución, que ha sabido hacer el mejor de los trabajos en equipo, tanto a nivel legislativo como administrativo y financiero”.

Siguió diciendo: “Me permito destacar, que en este periodo que finaliza (16 de agosto del 2018), la transparencia institucional ha colocado en una buena valoración al Senado de la República, pues en el 2017-2018 la ponderación que recibió el Portal de Transparencia del Senado, alcanzó el 93%, lo que nos colocó en un alto grado de fiabilidad en materia de Transparencia Institucional.

Todo esto fruto de un trabajo en equipo, tanto de ustedes señores Senadores, como de todo el material humano de la institución.
Régimen Parlamentario, Democracia Parlamentaria, Parlamentaraismo, Liberalismo. Obviamente, todo adaptado a nuestros tiempos, realidades, identidad e idiosincrasia, sin tener que violentar nuestra Constitución, como pudiéramos ver luego.

El autor es periodista

El Nacional

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