Crystal Copeland, la madre de las gemelas Caitlin y Emily está de acuerdo. Nunca se le olvidará el día que supo que estaba embarazada de siamesas, un fenómeno que ocurre una vez en cada 200.000 embarazos. Entre 40 y 60% de los siameses nacen muertos y cerca de 35% sobrevive sólo un día.
A finales de 1996 las cirugías y la medicina no estaban tan avanzadas.
“En ese entonces si buscabas siameses en internet todo lo que encontrabas eran imágenes de circo y de bebés muertos”, dijo Copeland.
Pero las bebés se movían y Copeland las había visto en un ultrasonido. Para ella estaban vivas y sanas.
“Estaban unidas por el hígado, pero no en el corazón, lo que podría haber sido fatal”, dijo Copeland. “Pensamos que tenían buenas posibilidades de separarse para que tuvieran una vida simplemente normal”, agregó.
El tratamiento y las cirugías para separarlas se llevaron a cabo cuando las bebés tenían 10 meses en el Hospital Children’s Memorial Hermann de Houston por el doctor Kevin Lally. Ahora que son dos adolescentes sonrientes su médico sigue feliz.
“No siempre se pueden ver los resultados a largo plazo de lo que hacemos y es muy agradable cuando encuentras uno”, dijo Lally.