SANTIAGO. Porque su padre le reclamó que dejara el alcohol y la amistad con gente de dudosa reputación, un joven de 19 años se hizo un disparo en la cabeza con fines suicidas, reportó la Policía.
Rafael Jorge Díaz (Rafelito) se disparó con la pistola Carandaí, calibre 9 milímetros propiedad de su padre Alfonso Rafael Jorge García, de 52 años, que portaba legalmente.
El joven fue ingresado en el hospital José María Cabral y Báez de aquí, donde el comunicador Johnny Lama, vocero de ese centro de salud, informó la tarde de ayer, que el paciente continuaba bajo observación de los médicos.
Mientras que Jorge García narró, que su vástago se encontraba cenando en la habitación de su residencia, en la calle 42 número 19 del barrio La Piña, de Cienfuegos, y al llamarle la atención para que dejara el consumo de bebidas alcohólicas y “la mala junta”, éste se incomodó ante los reclamos, cogió la pistola y se hizo el disparo.
La Policía Científica colectó como evidencia en el lugar del hecho, un fragmento de un proyectil mutilado, la pistola con su cargador y cuatro cápsulas. La Policía informó que el caso está bajo investigación.