El desacuerdo entre el Gobierno y la comisión de veeduría a propósito de las licitaciones para compras de emergencia eleva más la inquietud en torno a la transparencia de los procesos. Los veedores habían señalado la supuesta falta de unidad de criterios en los plazos y procesos, pero el ministro de la Presidencia y coordinador de la Comisión de Alto Nivel para la Contención y Prevención del virus no solo desestimó los alegatos, sino que defendió las operaciones. En ningún caso, según el funcionario, se puede hablar de irregularidades, en tanto aseguró que la mayoría de las licitaciones se publican con plazos de entre dos y ocho días. Si los veedores solo querían más claridad en las operaciones tendrán que insistir o documentar sus sugerencias o simplemente dejar las funciones para salvar su imagen. Es lo que indica la respuesta del ministro Montalvo.

