La salida del sistema eléctrico de una de las dos unidades de la Central Termoeléctrica Punta Catalina, por falta de combustible (carbón mineral) castiga a la población con prolongados apagones, que en algunos sectores son de hasta 12 horas.
Ante la situación que mantiene en vilo a la población con apagones de hasta 15 horas, y que afecta hasta los circuitos 24 horas, la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) convocó de urgencia a un proceso de licitación para adquirir carbón mineral para operar hasta mediados de enero de 2022, según indica el pliego de condiciones.
La central eléctrica estatal opera a 50 % de su capacidad, según explicaron tres peritos de la termoeléctrica al ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte, en una misiva enviada el 15 de este mes para justificar la aprobación del proceso de excepción que permitirá adquirir 420,000 toneladas métricas de ese material.
Las distribuidoras de electricidad atribuyen los apagones a la salida de la planta Punta Catalina 1, así como a las averías que se producen.
La CDEEE explicó que la urgencia ha sido ocasionada por un “retraso por parte del suplidor de carbón mineral (Xcoal Energy & Resources) (…) debido a dificultades geológicas y maquinarias en la mina de extracción de carbón”, de esa empresa estadounidense, lo que de seguro incrementará el precio.
Se estima que la compra de urgencia que ahora debe afrontar Punta Catalina costará al Estado unos 47 millones de dólares que se sumarán a los 120 millones de dólares que costarán otras 900,000 toneladas métricas de carbón de otro proceso de compra pública que se encuentra abierto.
Inestabilidad
La salida de Punta Catalina 1 ha hecho tambalear el sistema eléctrico, ya que la misma aporta 366 megavatios, una cantidad importante para desestabilizar el suministro eléctrico.
Las constantes interrupciones están generando protestas en diferentes puntos del país, especialmente en los barrios del Gran Santo Domingo, donde mucha gente se queja de que los apagones no los dejan dormir.
Entre los afectados están Villa Juana, Los Ríos, ensanche Espaillat, Villas Agrícolas, María Auxiliadora, Villa María, Los Mameyes, Villa Duarte, El Pensador, Los Molinos, Residencial las Américas, Villa Liberación, Invivienda, Villa Carmen, Mendosa, Los Mina, Sabana Perdida, Los Guarícanos, así como los sectores de Santo Domingo Oeste.
Estilistas, peluqueros, sastres y herreros se quejan de que apagones no les dejan trabajar y piden a las Empresas Distribuidoras de Electricidad su rápida intervención para la solución de ese problema.
También se reportan largos apagones en las diferentes regiones del país, dejando pérdidas millonarias al comercio y a otras actividades.
Las quejas
Comunitarios se quejan de que, a pesar de recibir un servicio eléctrico deficiente, la Superintendencia de Electricidad pretenda incrementar la tarifa eléctrica. Hay sectores que al día no reciben más de seis o siete horas diarias, y hasta los que tienen circuitos 24 horas están sufriendo los estragos de los apagones.