Marzo en las mujeres
Señor director:
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Las mujeres han de continuar avanzando unitariamente en pro de mayores y sustanciales conquistas. La conmemoración del 8 de marzo es un acto de justicia que engrandece a las generaciones que les sucedieron. Por respeto a su memoria se debe evaluar ¿el porqué no hemos logrado, las mujeres, algo más que lo que hasta hoy se ha alcanzado, por qué el liderazgo político femenino no avanza en término de propuestas femeninas para los principales cargos electivos, en lugar de estar impulsando el liderazgo de los hombres?
Hasta ahora solo hay una mujer, Geanilda Vásquez, aspirando para las próximas elecciones nacionales, a la presidencia del país a través del Partido Revolucionario Moderno. Si fueran enarbolados los intereses de género, temas que dominan bien las mujeres de los partidos, sin buscar una quinta pata al perro, se estructurara un movimiento único, sin precedente, para dar apoyo a esa mujer que aspira a dirigir al Estado Dominicano, como bien lo están haciendo varias mujeres en países como Brasil, Argentina, Chile, y en el pasado reciente Costa Rica. Se debe estar consciente de que la inobservancia de los intereses de género, solo beneficia a los hombres, cuyos intereses siguen determinando el futuro y el presente de las mujeres. Es tiempo ya de que los intereses de género penetren la conciencia femenina en el quehacer político, social, familiar y cultural.
Marzo tiene que seguir siendo evaluativo de los factores que continúan sin freno incidiendo en la violencia intrafamiliar, el incesto, el acoso sexual. Y, dado que todos los problemas deben tener una solución, se deben identificar acciones que no se hayan implementado para acabar con esos crímenes y delitos. Identificar a esas entidades públicas y privadas que están ignorando las consecuencias de la violencia intrafamiliar, y obviando la existencia de la Ley 27- 97, y el Código de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes. Saber, además, cuántos son los recursos económicos que falta poner a disposición para afrontar esa cultura de muerte que es la violencia intrafamiliar
Y finalmente, marzo debe volver nuestra mirada hacia aquellas mujeres mártires, heroínas de la patria, que nos dejaron un legado de dignidad y de férrea valentía en la defensa de los intereses patrios. Mujeres como las febreristas dominicanas que todo lo dieron por la Independencia Nacional, librándonos del yugo haitiano, ellas trazaron huellas que debíamos transitar.
Atentamente,
Melania Emeterio R.
lidiamelania@claro.net.do