Santo Domingo.- El Día Internacional del Trabajo encuentra a la empleomanía del país abatida por una gran inflación que afecta precios de alimentos y servicios básicos, sumada a los bajos salarios y escasez de empleos.
Las organizaciones de salariados aprovecharon la fecha para ratificar sus reclamos de reducción en los precios de la comida, los combustibles, las medicinas y un sistema de seguridad social que respete la dignidad humana.
Los niveles de deterioro y los altos costos de servicios esenciales, como agua potable, educación pública, electricidad y vivienda, siguen siendo motivo de preocupación para las entidades obreras, afectadas por una fragmentación y una debilidad organizativa nunca vistas en la historia del país.
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A esa debilidad se atribuyen las escasas reivindicaciones alcanzadas por esa clase, luego de décadas de luchas estériles del movimiento obrero.
Año tras año se repiten los mismos reclamos.
Convocan marcha
Unas 35 organizaciones obreras, estudiantiles, profesionales, campesinas y de la sociedad civil convocaron a una marcha hoy, que partirá desde el parque Enriquillo, en la avenida Duarte, en la capital, a las 9:00 de la mañana.
La manifestación se propone recorrer diversos barrios del Distrito nacional.
Entre las organizaciones convocantes figuran la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), el Colegio Médico Dominicano (CM), la Unión Clasista de Trabajadores (UCT), la federación de Asociaciones de Profesores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y la Federación Nacional de Transportistas la Nueva Opción (Fentrano).
Llama la atención que entre los convocantes no se encuentre ninguna de las centrales obreras tradicionales.
Las organizaciones convocantes hicieron un llamado a representantes de todos los sectores nacionales que les acompañen a conmemorar la fecha.
Una fecha histórica
La historia del Día Internacional del Trabajo se remonta a 1886, 136 años atrás, cuando fueron masacrados 38 obreros y 115 resultaron heridos, en Chicago, Estados Unidos, como consecuencia de la lucha por la reducción de la jornada laboral de 16 a 8 horas diarias
En 1889, tres años después, el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional declaró el 1 de mayo como el Día Internacional de los Trabajadores, para honrar la lucha de los obreros de Chicago y recordar a los mártires.
Desde entonces, el primero de mayo ha sido un día dedicado a las reivindicaciones laborales y de la exigencia por alcanzar mejoras generalizadas a las condiciones de vida de todos los trabajadores del mundo.