Tormenta Petrobras

La tormenta en que se ha convertido el escándalo de corrupción en Petrobras renovó su intensidad con la autorización de la Corte Suprema de Justicia para investigar a 12 senadores y 22 diputados por su presunta participación en los hechos. Entre los congresistas, que forman parte de los 54 políticos involucrados en el expediente, figuran nada menos que los presidentes de ambas cámaras. Con la revelación se temía un un tsunami que no dejara piedra sobre piedra, pues se había especulado que en el grupo figuraban los principales líderes políticos de Brasil.

Se habla de que la presidenta Dilma Rousseff y el expresidente Lula da Silva conocían el alcance de la trama, aunque no participaran de las operaciones. Los expresidentes del gigante estatal Sergio Gabrielli y Graca Foster, así como otros exejecutivos han sido interrogados.

Foster, designada por Rousseff y persona de su entorno, dejó el cargo hace alrededor de un mes acorralada por las denuncias de graves irregularidades en su gestión. Por el escándalo hay varios presos, pero las investigaciones generan cada día más expectativas por la jerarquía de los implicados y el impacto político de la operación.