Diálogo amplio
La posición de las partes para superar la crisis de Venezuela es lo que menos importa en estos momentos. Lo realmente importante es que con la mediación de la comunidad internacional el presidente Nicolás Maduro y los representantes de la oposición hayan aceptado sentarse a dialogar, en lugar de blindarse a cal y canto.
Tras los encuentros en Oslo, Noruega, la Unión Europea se reunirá mañana en Nueva York con el Grupo de Lima, que surgió para presionar la salida del poder de Maduro.
Aunque más de 50 países reconocen al presidente del Parlamento, Juan Guaidó, como el jefe interino del Gobierno de Venezuela, la realidad es que el poder lo detenta Maduro, quien cuenta con el respaldo de los militares y otros sectores.
Las sanciones económicas y la opción militar con que ha amenazado Estados Unidos no han hecho más que agravar el sufrimiento de la población, pero sin propiciar mayores grietas en la estructura de poder.
Washington puede entender que la solución de la crisis pasa por la salida del poder de Maduro. Y el mandatario puede plantear como primer paso la convocatoria de elecciones parlamentarias. Ambas son solo posiciones.