El secretario general de la Liga Municipal Dominicana (LMD) y el vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) se suman al clamor ciudadano contra el brote de pensiones y aumentos de sueldos entre regidores de diferentes ayuntamientos.
Johnny Jones y Servio Tulio Castaños coinciden definir como ilegales y carentes las concesiones de pensiones e incrementos salariales dispuestos en salas capitulares en favor de sus propios miembros.
Durante el largo y tedioso período de transición para la instalación de nuevas autoridades edilicias, regidores de no pocos cabildos han emprendido una especie de festín con el otorgamiento irregular de pensiones y de incrementos de sueldos, como si el mundo se fuera a acabar mañana.
Resulta que en los ayuntamientos donde se han decretado pensiones para regidores no existen fondos de jubilaciones ni reglamento para conceder ese tipo de privilegio con recursos de las alcaldías.
Los aumentos de sueldos en favor de regidores salientes y reelectos constituyen también una acción ilegal y carente de ética que hace pensar que en las salas capitulares están tirando la puerta por la ventana con los dineros públicos.
Como en la novela de García Márquez, toda la sociedad está conteste en que los festivales de pensiones y de aumentos salariales entre regidores es una acción ilegal y carente de ética, pero ningún sector ha tomado la iniciativa de impedir tales despropósitos mediante un recurso legal.
La Liga Municipal está compelida a afrontar a ediles y funcionarios de diversos cabildos que aprovechan los tres meses del periodo de transición para perpetrar todo tipo de tropelías, como si este país fuera una República de sálvese quien pueda.
A pesar de que todo el mundo condena las pensiones y aumentos de salarios que se autoimponen regidores de diversos ayuntamientos, como en la novela, nadie hace nada para evitarlo o impedirlo.