MOCA. El Tribunal de Atención Permanente de aquí inició esta mañana el conocimiento de la solicitud de medida de coerción contra José Rafael Camacho (Bobo), acusado de asesinar al dirigente perredeísta Antonio Peña Ramos, durante un enfrentamiento con simpatizantes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

El juicio es conducido por el juez Inocencio de Jesús Manías, mientras que el Ministerio Público está representado por la fiscal adjunta Yokasta Tiburcio.

Camacho fue detenido ayer, luego que la familia de Peña Ramos le acusara de haber disparado en el hemitorax izquierdo contra el dirigente del partido opositor.

El fiscal José Aníbal Carela expresó que está interesado en el esclarecimiento del caso y afirmó que el inculpado podría permanecer en prisión de tres a seis meses.

Los parientes de Peña Ramos aseguran que Camacho aprovechó el enfrentamiento entre perredeístas y peledeístas para matarlo.

Afirmaron que ambos tenían rencillas personales relacionadas con el juego de azar.

Los restos de Peña Ramos fueron sepultados ayer en el cementerio municipal con la asistencia de una multitud compuesta por militantes y dirigentes del PRD, familiares, amigos y relacionados.

El cortejo fúnebre partió de la residencia de Peña Ramos, en la carretera que une las comunidades Los Amaceyes y San Víctor.

En el cementerio la multitud interpretó el himno del PRD y enarbolaron banderas negras, en señal de luto.

Previamente hubo una misa de cuerpo presente en la parroquia Jesucristo Rey del Universo.