Corazón lacerado
A mis hijas: Laura, Ana y Yasmín
Luis Franco, el autor que parafraseé en “Pequeño Diccionario de la desobediencia” dice, en el capítulo dedicado a “La Mujer”: “La diferencia de sentido estético entre los sexos está en que el varón aspira a expresar la belleza mientras la hembra tiende a encarnarla en su persona. El hombre vive su amor hacia fuera y es capaz de crear estatuas, pinturas, palmas. La mujer hace del amor su creación, y de sí misma la estatua más bella y viviente de la tierra”.
Quise iniciar este amargo tema con esta frase hermosa que espero lo suavice. Hace unos diez días acontecieron dos hechos que me amargaron el alma y aún todavía me duele; dos mujeres de la misma edad (22 años), fueron asesinadas en circunstancias relacionadas a su estigmatización como objeto sexual. La muerte de una de ellas casi pasó desapercibida a pesar de tener toda la bruma de una novela de Stefan Zweig: fue encontrada muerta en un hotel de mala muerte a pocos pasos de donde conseguía sus clientes para sexo barato sin barreras, según contó una “compañera de labores”. Especulando se cree que el motivo fue que matándola su cliente se ahorraría los 200 o 300 pesos que eran la tarifa de una mujer de su “categoría” ¿sueno sarcástico? No crean. Esa es la maldita realidad de nuestra sociedad de hoy día.
La otra muchacha sí consiguió titulares de primera página, pues esta misma sociedad le brindó su muerte en bandeja al permitirle a una bestia que contaba con un perfomance de 35 violaciones y un asesinato comprobado, que la degollara en la misma cárcel donde le permitían visitas sexuales, a pesar de saber que era un hijo del diablo, un maldito. La sociedad, sus autoridades, no pudieron evitarle la muerte a estas dos mujeres, pero aparecerán en un seminario anunciando sus logros en la protección a la mujer, pura m…
Excusen lo amarga de esta entrega. No tenía otra forma. Suavizo con otra cita de Luis Franco: “La peripecia sexual suele ser para el hombre una amena aventura. Para la mujer, pese al tapiz furibundo que le tiende el genio de la especie es, esencialmente, un acontecimiento trágico”.