Son aterradores los números presentados por el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Miguel Ceara Hatton, sobre el impacto de la pandemia sanitaria en el país solo en 2020.
La pobreza se elevó de 21 a 23.4%, lo que según el estudio divulgado por el funcionario significa que 268,515 personas cayeron en la pobreza.
El golpe no ha sido más doloroso debido a los programas de mitigación que hasta ahora concluyen el mes entrante.
Según Ceara Hatton se ha aliviado la caída de los ingresos a través de transferencias monetarias directas a los hogares más vulnerables, evitándose de esa manera que 594,745 personas cayeran bajo la línea de la pobreza.
Conocida la dramática realidad a causa de la cual se perdieron 277,000 empleos lo importante es saber cuáles son las acciones concretas que se contemplan para recuperar la dinámica de la economía.
Es insuficiente afirmar que la prioridad del Gobierno es el empleo y que se realizan esfuerzos para paliar la situación.
Todavía se ignora incluso si se continuarán o suprimirán definitivamente los programas de emergencia que se extendieron hasta abril para aliviar el drama de las familias y de los desempleados por la covid.