
Decenas de personas familiares y amigos de los fallecidos en la tragedia del Jet Set seguían hoy llegando a la zona cero a depositar flores y encender velas. / Jorge González
Santo Domingo.-A pesar del profundo dolor que aún persiste en todo el país, el sector El Portal en el Distrito Nacional, comienza a mostrar signos de una vuelta a la normalidad tras la devastadora tragedia del colapso del techo del edificio de la discoteca Jet Set, que la pasada madrugada del martes 8 de abril a las 12:44 a. m. cobró la vida de 226 personas.
Cuando se habla de normalidad se quiere decir que en la zona ya hay tránsito abierto por todas las calles, negocios operando de forma habitual, vendedores ambulantes y ‘deliveries’ por doquier, gente rumbo a sus trabajos, mujeres barriendo sus frentes, vendedores de cafés en las esquinas, etcétera. Todos preparándose para un día normal.
Ahora bien, para lo que sí habrá que esperar un largo tiempo es para que las personas, principalmente de este sector de El Portal, puedan lidiar con el recuerdo de una tragedia que aunque no les afecto quizás directamente, les cambiara la vida para siempre.
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“Creo que nunca olvidaré este fatídico día. Recuerdo que casi no podía dormir por esos malditos mosquitos. Cuando de repente brinqué de mi cama al oír una fuerte explosión. Salí y me asome y no vi nada ya que vivo en los edificios de atrás, pero a lo lejos oí el murmullo de gente y luego gritos. Después de cinco minutos las sirenas del las ambulancias y los bomberos despertaron a todos”, dijo Juan Antonio Trejo, residente en la zona.
Zona cero
Hoy, como el viernes, familiares y amigos continúan llegando al perímetro de la colapsada edificación para depositar flores y encender velas en memoria de sus seres queridos.
Este gesto de recuerdo se ha convertido en una constante en las últimas 48 horas en la zona, manteniendo viva la memoria de las víctimas.

Toda el área de la edificación derrumbada ahora es una zona de desastre con características de escena del crimen, ya que el lugar está acordonado con una cinta amarilla de prohibición del paso, mientras efectivos de la Policía Nacional vigilan todo el perímetro.
Desde este sábado todas las labores de remoción de escombros terminaron y hasta ahora solo se espera el inicio de las investigaciones que pudieran arrojar luz sobre las posibles causas y consecuencias del trágico acontecimiento.