De salud y otras cosas

El qué dirán: te importa?

El qué dirán: te importa?

César Mella

Alexandra lleva media hora probándose vestidos para salir a una fiesta y lo que mas le preocupa es la opinión que sus amigas formulen del estilo del atuendo seleccionado.

Muchos seres humanos le dan prioridad a las opiniones del entorno y más que el ser ,les interesa aparentar para la aprobación de los demás.

No es fácil ser asertivo y autentico en nuestro comportamiento y es común que aprobemos o nos comportemos conforme reglas del entorno por miedo al rechazo y a la desaprobación de  los demás.

La frivolidad, las poses, la falta de autenticidad nos hace débiles y sumisos , veletas del grupo, que termina haciéndonos “ gente poco interesante”.

Actuar según tu propio criterio; ser autentico y mostrarte tal cual eres, a sabiendas que puedes ser    objeto de críticas, equivale a transitar la vida con pies de  plomo.

Quiero compartir con vosotros unos consejos:

1.- Expresa lo que quieres.-

Tus emociones, quererte con respeto y cariño, son vías para ser integro. Es el  caso de un empleado de una agencia de modelaje que expreso en una reunión con todo el personal lo siguiente : “ se viene rumorando que yo soy  gay  y es verdad, lo único que pido es respeto para mi persona y mi   familia pues mi expediente laboral  habla por mis actos”.

Después de un silencio sepulcral fue aplaudido.

2.- El miedo a meter la pata con una expresión.-

La política, la religión, la apariencia física, las problemáticas íntimas son temas que requieren de cierta confianza con el interlocutor para tratarlo.

En vez de acusar de gorda a una dama se puede decir “yo inicié la dieta de Scardale y he perdido 10 libras en un  mes”.

No hay que ser hiriente, a veces quieres ser tan sincero que puedes resultar cortante, máxime si hay un tercero en la conversación.

Hacerse el  pendejo y preguntar en vez de aseverar es una norma de prudencia.

3.- Sacúdete de la vergüenza.-

En medio de un grupo de amigos a Manuel se le fue la lengua y se refirió  en términos despectivos a un familiar de uno de los presentes.

Ya sobrio cito a su amigo y le pidió disculpas.

4.- Acéptate como eres.-

Mis pacientes acomplejados les digo: “no eres  mas ni menos que nadie”. Mas allá de las apariencias, la cárcel, el hospital por ejemplo, nos presentan experiencias que nos dicen: “caray y yo que vivo apocándome”

5.- Vence los miedos.-

Nadie escapara a la valoración de   los otros,  positivo o negativo.

Muchas personas se creen muy merecidos, no admiten un desaire y creen que todo el mundo los debe adular.

Hagas lo que hagas tendrás enemigos cordiales, críticos injustos, y si se te ocurre elevarte al  éxito, entonces el ejercito de derrotados del triunfo ajena te perseguirá”.

6.-  Puedes indignarte de vez en cuando.-

 No tragues tantos buches de sangre. Encojonate.

Deja esa sonrisa zalamera ; ese silencio cómplice . Mide consecuencias, pero hay cosas que no son negociables, sobre todo las éticas.

Si muchos funcionarios le hicieran caso al que dirán y le temieran a una justicia testicularmente bien  dotada, habría que construir cinco Najayos (cárceles) y entonces, el que dirán saldría de júbilo a las calles a apostar a la Nación.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación