Ni próstota ni semáfaro ni bayonesa
Orto-escritura.- La formación de dominicanismos – ya lo hemos explicado- obedece, al menos, a cinco tendencias, una de las cuales es la deformación o corruptela de otras palabras de nuestro idioma, como es el caso de “ruyir” y “ruyío”, que se corresponden con el verbo roer y su participio roído. Similar ocurre con “pendejá” (pendejada). […]