Las principales instituciones agropecuarias privadas plantearon la necesidad de dotar de nuevas tecnologías productivas a los pequeños y medianos productores de leche, que permita colocar al país en la ruta de la autosuficiencia y ser un referente en la región en materia de alta productividad y calidad.
Para esta iniciativa, la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), el Patronato Nacional de Ganaderos y la Asociación Dominicana de Hacendados y Agricultores (ADHA), recomendaron escoger como centro de producción y reproducción una finca ganadera modelo de alta calidad genética que utilice tecnología de punta.
Asimismo, que el gobierno implemente un programa de financiación a los pequeños y medianos ganaderos para que puedan acceder a nuevas tecnologías y de esa manera ser más competitivos.
Ese planteamiento, es favorecido, además, por el ministro de Agricultura, Ángel Estévez; el administrador del Banco Agrícola, Carlos Segura Foster y Ulises de Beras, presidente de la Asociación de Ganaderos de la región Este.
Estos dirigentes agropecuarios estuvieron de acuerdo en que para la ejecución del plan se tome de modelo a la Hacienda Los ángeles, unas de las fincas ganaderas más tecnificadas del país.
El planteamiento fue formulado en un encuentro con representantes del sector ganadero de todo el país, realizado este sábado en Hacienda Los Ángeles, propiedad del agroempresario Ángel Rondón, ubicada en el municipio Ramón Santana, de la provincia San Pedro de Macorís.
En el encuentro, auspiciado por la JAD, participaron las principales autoridades del sector agropecuario, y tuvo el propósito de compartir experiencia y observar la tecnología aplicada y el desarrollo de la ganadería en Hacienda Los Ángeles, que le ha permitido ser modelo en la producción de carne y leche.
Este hato ganadero es pionero en el país en la producción de embriones y sementales de la raza Brahman, y en el cruce de razas de ganado vacuno de alta calidad genética, utilizando tecnología de última generación.
“Hacienda Los Ángeles, hoy no está mostrando vacas que dan una productividad promedio leche por vaca cada día de 16 litros, siendo el promedio nacional entre 4 y 6 litros ¨, destacó el presidente ejecutivo de la JAD, ingeniero Osmar Benítez.
Indicó que esta hacienda se ha sacrificado, invertido en el mejoramiento genético, en la utilización de una tecnología de embriones, mediante la cual cientos de vacas han nacido a través de ese procedimiento.
“Por eso entendemos que el Gobierno debe propiciar financiamiento a largo plazo para el pequeño y mediano ganadero a fin de que puedan acceder a esas nuevas tecnologías y de esa forma aumentar los niveles de producción y productividad lechera.
Benítez explicó que lo plantea la JAD es que el gobierno diseñe una política de financiamiento a largo plazo para que los pequeños y medianos ganaderos puedan comprar embriones fertilizados e implantarlos en sus reses, para de esa forma obtener vacas de alta productividad y por ende aumentar sus márgenes de beneficios”.
Insistió en que falta invertir para que los ganaderos más pobres puedan hacerlo, no regalándole el dinero, sino financiándolo para volver al esquema de crédito de fondo FIDE, que fue exitoso en los gobiernos de Balaguer, a plazo de 12 años, con lo cual se quita presión al productor al disponer de mayor tiempo para liquidarlo.
“Por eso que es nosotros planteamos se implemente un programa de crédito a largos plazos, a 8, 10 12 años que les permita al ganadero hacer las inversiones en innovación de su modelo de producción y de esa misma manera cambiar sus condiciones de vida”, enfatizó.
Con ese criterio coincidió el presidente del Patronato Nacional de Ganadero, Marcelino Vargas, quien también ponderó la innovación introducida por la hacienda Los Ángeles en su modelo de producción.
Sostuvo que con la implementación de ese programa en las demás fincas del país se lograría de manera significativa un aumento en la producción de leche y carne.
Vargas dijo que el Patronato de Ganadero, la JAD y las asociaciones de productores están de acuerdo en que se implemente un programa como el planteado, con meta y un propósito, que permita al ganadero acceder a nuevos mecanismos de producción, como es el cruce de embriones y la mejoría de los pastos.