Hoy es un día muy especial para el fortalecimiento de la democracia porque se produce un cambio del mando presidencial pacífico, ordenado, de conformidad con la Constitución y en consonancia con la voluntad popular expresada en las urnas.

Danilo Medina Sánchez, quien hoy concluye su gestión de gobierno, entrega el solio presidencial a Luis Abinader Corona, quien dirigirá los destinos de la nación por los próximos cuatro años, al jurar cumplir y hacer cumplir la Carta Magna.

Esta fiesta de la democracia coincide con el 157 aniversario de la Restauración de la República, que puso fin al coloniaje español contratado por el general Pedro Santana, 17 años después de proclamada la Independencia Nacional, por lo que sobran los motivos para que los dominicanos invoquen hoy el orgullo patrio.

El presidente Danilo Medina ha dicho que desciende las escalinatas del Palacio Nacional con la frente en alto, convencido de que ha cumplido con su deber, que durante su gestión se respetaron los derechos ciudadanos, por lo que su gobierno aplica para inscribirse entre los regímenes democráticos en la historia republicana.

Al licenciado Abinader Corona le corresponderá ceñirse la banda presidencial en uno de los momentos más aciagos desde el trabucazo en la Puerta de la Misericordia, el 27 de febrero de 1844, porque tendrá el urgente compromiso de contener la pandemia del coronavirus y relanzar la economía.

La historia se encargará de juzgar al presidente Medina y a su gobierno, aunque desde ya corresponde a las presentes generaciones valorar lo bueno o lo malo que puedan atribuirle, aunque será de justicia reconocer que durante su gestión la democracia no pereció.

Abinader Corona ocupa desde hoy la primera magistratura del Estado amparado en la Constitución y el voto mayoritario expresado en los comicios del 5 de julio, por lo que le asiste derecho a granjearse respaldo, confianza y buenos deseos de la población, en la esperanza de que su gestión sea coronada por el éxito.

En medio del rebrote pandémico y de una despiadada crisis económica, los dominicanos se regocijan hoy en festejar el aniversario de la Restauración y la inauguración de un nuevo gobierno, que debe ser expresión y producto de una democracia fuerte, vigorosa, como la soñaron los padres de la patria y los héroes de la Restauración.