Opinión

Francisco Domínguez Brito

Francisco Domínguez Brito

Bizarro de la dignidad, la ley y el deber, se enfrenta a las adversidades y la fuerza con tenacidad, capacidad y determinismo en el cumplimiento de la Constitución y las leyes, sin importar las contingencias humanas en el fiel desempeño de sus atribuciones con esmero y vocación nacionalista.

Titán de la verdad, la Justicia y la Patria, siempre erguido dando el frente sin detenerse, pudiendo entonar a Juan Sánchez Ramírez, en Palo Hincado al arengar a sus tropas: “Pena de la vida del soldado que tocase el tambor de retirada, aunque sea yo mismo”.

El Procurador General de la República, doctor Francisco Domínguez Brito, es un ejemplo a seguir por las presentes y futuras generaciones, pues aparte de las funciones éticas y morales, siendo la propia esencia de una verdadera representación del Ministerio Publico, a quien debería entregársele la bandera de la responsabilidad.

El procurador tiene excelentes y brillantes funcionarios y empleados, expertos en diferentes áreas del conocimiento técnico, científico, administrativo, constitucional, jurídico y de las diferentes geografías del Derecho, que vienen enalteciendo la responsabilidad de la sociedad, dígase lo que se diga y piénsese lo que se piense.

Como Sócrates al preguntarle al sabio que era ella y respondió: “Soy amigo de Platón pero lo soy más de la verdad”, y le expresamos las frases de Juvenal: “Si la prudencia te acompaña, ningún poder celestial te desampara”.

La verdad siempre sale a flote, temprano o tarde, porque de tantas cosas, ella es la más excitante del mundo, más que el amor. Domínguez Brito es un luchador y defensor del imperio de la justicia y debe continuar sin temores, ni dobleces por esa senda que se coloca ayer y hoy como un baluarte en la búsqueda de la justicia y defensa de la verdad, los valores del patriotismo y la vergüenza nacional.

Solo el hombre capaz y preparado, diligente y activo, cumplidor de sus deberes al más armonioso combate, a la resistencia más obstinada, logra el favor de su pueblo, y él lo sustenta, y como expresa Ventura Ruiz Aguilera: “Si alguna vez sintiesen flaquear tu ánimo, piensa que a los audaces les ayuda el valor y la fama” “No arrojara el limpio acero, mientras oiga el clarín de las peleas. Soldado que su honor conserva entero, ni del piloto el ánimo flaquea, porque rayos alumbren su camino y el solo inmenso alborotarse veas. Siempre luchar del hombre es el destino, y al que impávido lucha con fe ardiente, le da la gloria su laurel divino”.

San Pablo dijo: “cada cual se le reabrirá su recompensa según su trabajo”.Francisco Domínguez Brito, estandarte, moral, valentía y trabajo. ¡Adelante, siempre adelante!

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación