Perversa catástasis
Es desconcertante conocer los múltiples casos de corrupción que a diario se descubren en todas las latitudes. Avergüenza constatar a lo que se someten las personas en pos del dinero y –desafortunadamente- ese mal ha hecho metástasis en las diferentes esferas de la sociedad.
¿Cómo llegó la corrupción al fútbol?
Recordemos que, cuando la selección de Brasil ganó las Copas del Mundo de 1958 y 1962, el presidente de la poderosa Confederación Brasileña de Deportes (CBD) era Joao Havelange y que durante el Mundial de Inglaterra 1966, el acompañó a su selección y vio como el inglés Sir Stanley Rous – presidente de la FIFA – intervenía en la designación de los árbitros. Las selecciones de Argentina, Brasil y Uruguay sufrieron verdaderas arbitrariedades y quedaron eliminadas del certamen.
Posterior al Mundial, Joao Havelange se postuló a la presidencia de la FIFA y para ello se alió al astuto alemán Horst Dassler (hijo del creador de Adidas) que hizo múltiples donaciones de indumentaria deportiva a las federaciones minoritarias de África y Concacaf. Así fue como logró los votos necesarios para que – en 1978 – se convirtiera en el presidente de la FIFA, siendo el primer y único latino americano en ostentar esa posición.
Bajo su presidencia, el fútbol mundial experimentó una verdadera y sorprendente metamorfosis. Se crearon los mundiales Sub – 17 y Sub-20 además del Mundial femenino, se duplicó el número de selecciones en la fase final de la Copa del Mundo y – sobre todo – comenzó a mercadear los derechos de televisión de sus certámenes.
Al ser la FIFA una institución sin fines de lucro, Havelange propició una relación con la empresa suiza ISL (International Sports and Leisure) que era dirigida por Horst Dassler y el publicista británico Patrick Nally.
Utilizando una fórmula sencilla, ISL ganó millones de dólares. La empresa compraba a precio irrisorio los derechos de todos los mundiales a la FIFA y luego los vendía individualmente a patrocinadores internacionales a precios siderales.
Este “negocio redondo” mutó rápidamente a todas las instancias del fútbol mundial y, cuando Joseph Blatter sustituye a Havelange en la presidencia de la FIFA, hereda todo el proceso que él vio nacer cuando era secretario general de Havelange durante 17 años.
Una década después de la llegada de Blatter a la presidencia de FIFA, se descubrió que, desde el pequeño Cantón de Zug (Paraíso fiscal suizo) la empresa ISL realizaba periódicamente transferencias millonarias a dirigentes del fútbol mundial.
A partir de ese momento y como consecuencia de profundas investigaciones, el mundo conoce las interioridades del caso FIFA GATE.
Por avaricia, los máximos dirigentes del fútbol mundial, mancharon para siempre el balón.
Muchos de los involucrados fueron expulsados de por vida del fútbol, otros están presos y algunos fallecieron, mientras tanto, el fútbol busca recuperar su credibilidad.
El escritor español Miguel de Unamuno (1864-1936) decía que “La opinión de una multitud era siempre más creíble que la de una persona”.
¿Es así?
Por: Jorge Rolando Bauger
jbauger@hotmail.com