Este dos de octubre marca el doloroso recuerdo de una historia atroz en la República Dominicana: la matanza de haitianos que cumple 86 años. Un sombrío episodio que nos recuerda la importancia de la justicia, la tolerancia y el respeto por la dignidad humana, invitándonos a aprender de nuestro pasado para construir un futuro más inclusivo y compasivo.
¿Sabías que en República Dominicana hubo una matanza de haitianos? Retrocedamos en el tiempo, a 86 años atrás, al dos de octubre de 1937. El genocida fue un hombre muy malo, un tirano llamado Rafael Leónidas Trujillo Molina: Una época inmensamente triste y dolorosa en la historia.
Lo bautizaron como “El Corte” o la “Masacre del Perejil”, porque hay una leyenda urbana que dice que supuestamente los soldados dominicanos llevaban una rama de perejil y les pedían a quienes (por su color oscuro) creían que eran haitianos que pronunciasen esta palabra.
A aquellos que tenían como lengua materna el criollo (el creole) haitiano les resultaba difícil articular la palabra perejil en español, un error que podía costarles la vida. Según la leyenda, muchos haitianos fueron pasados por las armas de sus verdugos porque se les enredaba la lengua y decían “perejila”, “perejilo”. Algunas personas dicen que incluso dominicanos con piel oscura también fueron víctimas de la masacre.
Desde el dos de octubre de 1937, Trujillo, quien era un líder muy poderoso, ordenó que mataran a personas de Haití que vivían en la República Dominicana. El Ejército Nacional y la Policía Nacional ayudaron a perseguir a estas personas y hacerles daños.
No sabemos exactamente cuántas personas fueron asesinadas, hay informes confusos y erráticos, dando lugar a muchas leyendas urbanas: muchas habladurías.
Algunos dicen que entre 5,000 y 25,000 murieron, otros expresan que fueron más aún, llegando a los 35 mil. El gobierno de Haití dijo que murieron 12,000. El mismo presidente Trujillo señaló que fueron 18,000. Otros informes hablan de 15,000 a 20,000 personas.
Como se puede ver, lo único seguro es que ocurrió una matanza, donde muchos inocentes perdieron la vida. El gobierno de Trujillo difundió información exagerada para asustar a los haitianos y hacer que respetaran la frontera entre los dos países.
Por: Roberto Valenzuela