Con ánimo de continuar divirtiéndose y aprendiendo más de 900 niños vieron concluida la versión 13 del Campamento de Verano de la Fundación y el Club Mauricio Báez, con la esperanza de volver el año que viene.

Como en años anteriores, “un piscinazo” marcó el punto final del tradicional encuentro veraniego, en donde los pequeños participaron de forma gratuita de dinámicas educativas, deportivas y diversión durante tres semanas de pura intensidad.
César Heredia, presidente de la Fundación Mauricio Báez, describió como espectacular el cierre del campamento al señalar que pudieron desarrollar todo el programa de actividades que se plantearon.
La labor de los mauricianos fue posible gracias a la entrega de los 250 voluntarios quienes se encargaron de cada una de las dinámicas y del cuidado de los niños. Del mismo modo se destacaron en la parte operativa y administrativa Amaury Heredia Guerra, Silvania Aquino, Cairo Frías y José -Boyón- Domínguez.

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“Nos sentimos agradecidos de todos y cada uno de los miembros que nos ayudaron una vez más a concluir con éxito este campamento”, destacó César, quien además resaltó la asesoría de don Leo Corporán, quien estuvo a cargo de aconsejar a los voluntarios junto a Arismendy Pieter.
Pese a sonreír y disfrutar de una mañana soleada y de piscina para el cierre, los campistas al ser abordados coincidían en que disfrutaron la experiencia y que les gustaría volver a repetirla, poniendo de manifiesto lo aprendido y las diversiones vividas, destacando también las amistades que allí generaron.