Legado

Luis Mejía Oviedo ha decidido poner fin a partir de enero entrante a su exitosa gestión como presidente del Comité Olímpico Dominicano (COD).

Y de esa manera también terminar con las intrigas que de un tiempo a esta parte minaban su ejercicio.

Un balance somero, sin ponderar siquiera las dificultades, arroja muchas luces y escasas sombras. Bajo su presidencia República Dominicana conquistó varias medallas olímpicas, incluida la presea dorada, y en los torneos panamericanos en algunas disciplinas se convirtió en una potencia.

Pero de un tiempo a esta parte intereses bastardos tenían una aviesa campaña para que Mejía saltara del cargo.

Fuera del olimpismo se tiene que respetar su vida privada, que siempre fue de respeto. Ahora que ha decidido marcharse hay que reconocerle sus grandes aportes para convertir al país en una marca olímpica.