¿Cómo pagar a Cuesta?
¿Con qué homenaje se podría hacer justicia a Librería Cuesta trascendido su carácter de empresa privada, para elevarse a la plataforma más importante para quienes aman la lectura, aspiran a tener lo más reciente de la producción bibliográfica nacional, espacio disponible para la presentación, debate y promoción del libro, o plaza pública para el ejercicio de uno de los mayores placeres de la vida: la lectura?.
No hay forma de reconocer lo que Cuesta representa para honrar su servicio, su constancia, sus espacios para acomodar lectores en procura de las novedades, el título necesitado para para el trabajo (profesional o estudiantil) en proceso, el producto editorial infantil.
Más que una librería con el estilo comercial de Cuesta, es una inmensa biblioteca pública. Ha sido un jardín infantil en el que el libro ha sido el centro de atracción.
Librería Cuesta ha sido un regalo para el relajamiento ciudadano. Entrar a Cuesta y recorrer sus módulos temáticos a la entrada (los libros de éxito, los nacionales, los de ciencia, los de salud, los de crecimiento personal tienen el efecto de una exposición que actualiza al lector. Recorrer sus góndolas es camino de descubrimientos. Todos aquellos libros disponibles para la compra o la lectura, en uno de los sillones dispuestos para tal fin.
Cuesta no es sólo la mayor librería de la República Dominicana, porque ello sería reducir su trascendencia al tamaño de sus espacios y a la relación extensa de sus títulos en oferta.
Cuesta es parte del cuerpo cultural dominicano. Su existencia está dada por una coincidencia de lectores (adultos e infantiles), autores y autoras gerentes corporativos, personal de apoyo y trayectoria histórica, en un interés común: la magia de la lectura en todos los ámbitos del conocimiento humano.
Lo que hoy es la bibliográficamente acreditada marca de Librería Cuesta, se inició como Centro Cuesta del Libro, cuando abrió sus puertas el 30 de abril de 1992, con la inspiración y el concepto de un librero español que poca gente recuerda hoy tal cual era entonces: Lucio Casado.
Abrió sus puertas junto al supermercado Nacional de la avenida Abraham Lincoln, dando inicio a la mayor y más importante librería de la República Dominicana.
Con las conexiones internacionales para obtener los títulos en español de mayo actualidad, Centro Cuesta del Libro se fue afianzando como una marca del mercado del libro, que nunca ha dejado de operar y crecer. En 1996 abrió su segunda y única sucursal en Santiago de los Caballeros, con el mismo criterio de diseño del espacio orientado a proporcionar a los lectores/visitantes/compradores, de un ambiente adecuado.
Ya en los años dos mil, pasó a ser Librería Cuesta, remodeló su espacio en Santo Domingo, al crear un auditorio que fue bautizado como el Foro Pedro Mir y que ha servido gratis diez años para autores, autoras, conferenciantes, gestores culturales, artistas; se adecuó una cafetería que es espacio amigable para el encuentro de gente.
En su papel de gestión cultural es imposible dejar de mencionar a Verónica Sención, una de las figuras más destacadas de la gestión cultural privada del país.
Hoy día, el espacio de Lucio Casado, ha sido ocupado por el alemán aplatanado Hans Kuehn, líder de un equipo que ha mantenido e incrementado la condición de Librería Cuesta de institución cultural, respecto de la cual, ninguna placa de reconocimiento será suficiente.