Pareciera que la canción del grupo Toque Profundo, “Mi País”, no perdiera vigencia. El problema eléctrico, la creciente deuda, la contaminación, el costo de la vida y el desempleo, todo inmortalizado en esas letras de hace 25 años, transcurso por el cual han desfilado promesas y solo han llegado las decepciones.
La reciente encuesta Gallup-Hoy es lapidaria. El 64.4% de los dominicanos vive con miedo, la delincuencia ha destrozado el discurso de percepción y ha pasado a ser la principal preocupación nacional. Atrás han quedado los números de una supuesta disminución. Los asaltos, robos y actos de sicariatos se multiplican mientras no existe una política clara del Gobierno.
El costo de la vida es el segundo problema nacional. Sueldos indignos, con el 94% de los asalariados ganando menos de RD$ 30 mil mensual, y el 78% percibiendo menos de RD$ 15 mil, tienen a la familia dominicana con un “hoyo” en el bolsillo, viviendo el drama de no saber cómo llegar a fin de mes.
El tercer problema que más aqueja a la población va de la mano con el segundo, y es el desempleo. Vivimos en un sistema que ha doblado el promedio de desempleo con relación al resto de los países, y si hay trabajo es mal pagado. No por nada el 62% de los encuestados por Gallup considera que la economía va por mal camino. Para rematar, 56% de la muestra considera que su economía personal también va mal.
En definitiva, el país vive los mismos problemas básicos de siempre, y con las mismas promesas de solución, poco y nada va a cambiar para bien. El rumbo es otro, el modelo es distinto y los que lleven las riendas del Gobierno también deben ser renovados. El PLD ha estado 10 años seguidos en el Estado. Basta con preguntarse cuántos problemas han resuelto.