Hace algunos días, el presidente del Comité Organizador de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, José Monegro, se reunió con el Comité Olímpico Dominicano en procura de socializar y armonizar todo lo concerniente a lo que eufemísticamente se ha denominado: un compromiso de nación.

Si juzgamos por los rostros sonrientes de los participantes, sobre todo, los de Monegro y Garibaldy Bautista, la conclusión sería: que el Comité Olímpico Dominicano y el Comité Organizador de los Juegos Santo Domingo 2026, mantienen una armoniosa relación, pero no es así. Y eso lo saben Monegro y Garibaldy. A decir verdad, esa reunión buscaba bajar la tensión a lo interno del COD, que exige ser vanguardia de la justa, tal y como lo expresó públicamente el presidente del COD. No hay que dar rodeos: existe una lucha por el control de los juegos.

El secretario general del Comité Olímpico Dominicano, Luis Chanlatte, es un crítico acérrimo del Comité Organizador y entiende que hay un espacio dentro del organigrama de los juegos que le pertenece al COD y según sus palabras, lo está ocupando el Comité Organizador.

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¿Cuál es la posición de Luis Chanlatte? Ahí les va: ‘’ Al Comité Olímpico Dominicano nadie lo va a marginar, pues es quien tiene el derecho de solicitud de sede, es parte del Comité Organizador, y es quien avala los procesos de construcción y remodelación de las instalaciones’’ Y me dijo algo más: ‘’ El gobierno central y las ciudades siempre aportan los fondos, pero los Comités Olímpicos Nacionales, tienen derechos hasta de comercialización, entre otras cosas que vamos a demostrar.’’

‘’ En el 1974, Balaguer respetó al COD y a Wiche García Saleta, en el 1986, Jorge Blanco respetó a José Joaquín Puello y en el 2003, Hipólito Mejía, también respetó al doctor Puello.’’ Añadió Chanlatte.

Otro de los argumentos esgrimidos por el secretario general del COD, es que José Monegro y el Comité Organizador han realizado varias designaciones sin siquiera consultar al COD.

Dentro sus acerbas críticas, Chanlatte tuvo un espacio de elogio a José Monegro:’’ Reconozco que su designación por el presidente Abinader fue acertada. Él es un caballero, con una gran capacidad para negociar y equilibrar. Y sé que lo hará. Él tiene la experiencia para no dejarse arropar de élites que lo quieren todo.’’

Esa es la situación. Yo pienso que el asunto es fácil de arreglar: o se usa la política del garrote de Teddy Roosevelt o la diplomacia del dólar o repartición de empleos de William Taft.

Cualquiera que sea, debe ir en beneficio de los atletas y el éxito de la justa.

Por: Ramón Rodríguez
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