Opinión Articulistas

Mamá no puedo con ella

Mamá no puedo con ella

Luis Maria Ruiz Pou

Haití, es el país más pobre de América Latina y el Caribe, con una tasa de desigualdad de ingresos más alta del mundo. La pobreza en Haití se caracteriza en gran medida por las extremas desigualdades sociales, la exclusión de los procesos de toma de decisiones y una creciente vulnerabilidad ante los desastres y los conflictos inherentes a la inestabilidad sociopolítica sistémica.

Los organismos internacionales están presionando para que ayudemos resolver los problemas de los haitianos, quienes han orquestado todo tipo de campaña difamadora para doblarle el pulso al gobierno, a los fines de que legalicen a sus ciudadanos indocumentados que cruzan nuestras fronteras sin documento de identidad, en vista de que su gobierno los ignora como ciudadanos.

Esos mismos, se habían comprometido ayudar a desarrollar la hermana nación; sin embargo, hasta hoy, no han entregado ni un solo centavos, como lo informó en Dajabón el ex presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter, quien aseguró que no existe forma alguna de que República Dominicana sea capaz de eliminar la migración haitiana. ¿De qué se quejan estos señores, si somos el único país del mundo con frontera abierta para que ingrese todo el que les de su “bendita” gana, sin que las autoridades los molesten?.

Malos dominicanos que, en contubernio con señores de la Unión Europea, quieren que la República Dominicana cargue sola con los problemas socioeconómico de la empobrecida nación, como los casos de las parturientas haitianas con el apoyo de autoridades civiles y militares que, cruzan nuestra frontera para dar a luz en los hospitales públicos a costa de los impuestos que pagamos los dominicanos.

La inversión en los servicios sociales para beneficios de esos ciudadanos, las asistencias a las escuelas públicas, ocupando el espacio de los dominicanos.

Actualmente nuestro país está haciendo más por la hermana Haití que los países de la Comunidad Económica Europea (UE) que, en el siglo pasado se beneficiaron, saqueando los recursos naturales que, en un momento fue la más próspera del caribe, especialmente Francia y Canadá. ¿Hasta dónde quiere la UE que nosotros llevemos en nuestros hombros el problema de los haitianos, como si se tratara del “hombre con el bacalao a cuesta”?.

Esos ciudadanos, viven presionando a la comunidad internacional, sobre la base de sus necesidades que no les han brindado sus gobiernos.

Por: Luis María Ruiz Pou
luisruiz47@gmail.com

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación