¿Qué Pasa?

Milagros Sánchez: “Mis hijos son lo mejor que Dios pudo haberme dado”

Milagros Sánchez: “Mis hijos son lo mejor que Dios pudo haberme dado”

Daniel Santacruz, Milagros Sánchez y Manny Cruz.

Pocas cosas son tan valiosas como los recuerdos de una madre, de la época en que sus hijos estaban pequeños.
Doña Milagros Sánchez demuestra esta afirmación cuando de seguro con la mejor de sus sonrisas, recuerda cómo sus hijos, los multipremiados cantantes y compositores Daniel Santacruz y Manny Cruz demostraban su vocación desde que eran chiquitos.


A Daniel le encantaba cantar desde los 9 años y tomaba su cepillo de dientes como micrófono. “recuerdo que una de tantas noches que tuvimos un apagón con un radio grabador le hice una entrevista como si se hubiera ido de gira a Argentina; yo le preguntaba y él solo me respondía con monosílabos. Después de la “entrevista” cantó El Jardinero, que decía: tengo un jardín de rosas…”


“Emmanuel (Manny) era un gran bailador de merengue desde muy pequeñito, no habia cumplido los 5 años cuando desde que escuchaba el que dice “cójelo león” y donde quiera que estuviera hacía la coreografía igual que la orquesta. Tocaba merengue con sus manitas, pero me decía que no sabía cantar y yo le respondía: ¿cómo que no sabes? Pero tienes una voz bella”


Para doña Milagros sus hijos no son dos jóvenes famosos, sino sus hijos amados y lo mejor que Dios pudo haberle dado para hacer su vida más fácil, alegre y llena de amor.


Llena de experiencia, con dos hijos reconocidos y de conducta intachable, la madre de Manny y Daniel aporta de su experiencia para las madres jóvenes que están criando sus hijos ahora.


“Que le pidan a Dios ayuda, guía y sabiduría, para poder llevar a sus hijos por el camino de la verdad, yo sin la ayuda de Dios, no hubiera podido hacer ni la 4ta parte de lo que hice que fue amarlos disciplinarlos, decirles que no, mucho más que si, no darles todo lo que pidan, pues haciendo eso hacemos mal, hay que enseñarles el valor de las cosas y de los seres humanos, a amar a Dios y a saber quiénes son sus amigos”.


Explica que si las madres no dicen a sus hijos el camino correcto, lo bueno y lo malo, por ahí afuera hay muchas personas que están listas para mostrarles el camino equivocado.