Aunque se ha dado cuenta de un elemento que se presta a conjeturas, aun así cabe esperar que un velo de misterio no cubra la desaparición de un avión que había salido el miércoles en la noche del aeropuerto Las Américas con destino a Punta Cana. La aeronave tipo Hawker 125, N600AE, despegó a las 10:42 de la noche, pero según el Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) carecía de plan de vuelo.
Otras desapariciones de aviones han sido aclaradas a la mayor brevedad y en esta ocasión se espera que el IDAC utilice todos sus recursos para establecer el paradero y la causa de la desaparición de la nave. La gente suele asociar los casos con operaciones ilegales, entre las que figura el tráfico humano y de drogas.
El buen crédito que se ha labrado el director del IDAC, Alejandro Herrera, es un factor que inspira optimismo en cuanto a que la desaparición de la aeronave no quedará impune. Y no puede ser de otra manera, aunque se tenga que remover aire, mar y tierra.
El Nacional
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