La participación de la procuradora Miriam Germán eleva la connotación de los interrogatorios a los exministros Donald Guerrero y Simón Lizardo por supuestas irregularidades en el desempeño de sus funciones.
El Ministerio Público se ocupó de informar no solo sobre la participación de Germán, sino de explicar que Guerrero, exministro de Hacienda, es investigado sobre supuestas irregularidades en su declaración jurada, asociación de malhechores, coalición de funcionarios, desfalco, estafa contra el Estado, falsedad en documentos públicos y lavado de activos.
Con tantos delitos parece que el sometimiento a la justicia del también dirigente del PLD, quien declaró un patrimonio de 762 millones de pesos y ha sido interrogado en varias ocasiones, no lo despinta nadie.
De Lizardo, quien entre otras posiciones se desempeñó como ministro de Hacienda y administrador del Banco de Reservas, se supo a última hora de su interrogatorio por alegadas irregularidades que no se especificaron.
De los diferentes escándalos de corrupción que se investigan es obvio que los casos de Guerrero y Lizardo, también dirigente del PLD, son los más relevantes.
Aunque se ha interrogado a otros exfuncionarios por supuestas inconsistencias en su patrimonio, sin que a la fecha se haya instrumentado expediente contra ninguno en particular, no parece que con el interés de la procuradora general de la República los casos de Guerrero y Lizardo se reduzcan a simples alharacas.

