De izquierda a derecha: Ricardo Gadala, administración junta directiva; José Alfredo Corripio; el padre Domingo Legua, fundador del BARD; José Monegro, director de El Día y Julinna Staffeld, directora ejecutiva.
Santo Domingo.- El Banco de Alimentos de República Dominicana (BARD) hizo un llamado al Gobierno para que flexibilice la Ley 09-21, sobre los productos y bienes industrializados que no pueden ser comercializados por las empresas.
Esta ley establece de manera específica que todos los productos y bienes industrializados que no pueden ser comercializados por las empresas, por cualquiera de los motivos establecidos en la norma, deben ser destruidos de manera obligatoria en presencia de un funcionario de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), ya que, si son donados deben pagar impuestos.
El Banco de Alimentos asegura que, en la actualidad, a las empresas y comerciantes solo se les permite donar un 5% de los productos que no pueden ser vendidos y que son obligados a deshacerse del resto, cuando bien pudieran donar la cantidad total de estos productos para beneficio de quienes más lo necesitan.
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“Por esto solicitamos que los alimentos aptos para el consumo humano sean excluidos de esa norma y en vez de destruirlos, el Estado promueva que sean donados al Banco, quienes estamos en la disposición de certificar las donaciones recibidas por los contribuyentes”, dijo Julinna Staffeld, directora ejecutiva del BARD.
Asimismo, el padre Domingo Legua, fundador del BARD, insistió en la necesidad de que se promulgue la ley para la reducción de la perdida y desperdicio de alimentos, que en 2018 fue aprobada en segunda lectura por la Cámara de Diputados como proyecto y que actualmente reposa en el Senado.
Esta tiene por objetivo establecer normas que garanticen el aprovechamiento de residuos alimenticios orgánicos e industriales, que sean aptos para el uso o consumo humano, según lo establezcan las reglas de Medio Ambiente y Salud.
Sus declaraciones fueron emitidas en el almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, en donde también estuvieron presentes Fernando Langa, legal de la junta directiva y Ricardo Gadala, de la administración junta directiva.
Sobre el Banco de Alimentos
Esta es una institución sin fines de lucro que tiene como función principal rescatar toda clase de alimentos que pierden su valor comercial porque están próximos a vencerse, porque no cumplen con los estándares de tamaño o color, pero que mantienen su inocuidad y están aptos para el consumo humano.
Luego de que estos alimentos son rescatados se donan a instituciones vulnerables a la inseguridad alimentaria, como son los hogares de ancianos, los orfanatos, casas de niños maltratados, casas de adultos en recuperación, entre otros.
Cabe resaltar que, el BARD no recibe donaciones de productos vencidos o en mal estado.
Actualmente, más de 200 instituciones benéficas en el país reciben donaciones de alimentos, que les sirven para satisfacer alrededor de 20,000 personas de manera diaria.
