¿Cómo puede un país reconocer por siempre la memoria de quienes, desde la carrera de las armas, ofrendan sus vidas en el cumplimiento de su deber y en función de la lealtad a los principios que juran obedecer cuando ingresan a la filas de la institución?
La fórmula encontrada para hacer justicia a quienes pagaron el precio más alto, a quienes cumplieron con el deber, han sido los monumentos al soldado desconocido o al soldado caído, en una evidente referencia a los soldados de la base, los que no tuvieron resalto en sus nombres, los de los rangos menores, los que integran la base de la fuerza.
República Dominicana es el país que más recientemente, apenas la semana pasada, se integra a las naciones del mundo, con la inauguración de la Plaza Patriótica a la Gloria del Caído, en el recinto del Ministerio de las Fuerzas Armadas.
El acto fue solemne y encabezado por el Ministro de las F.F. A.A. , almirante Sigfrido Pared Pérez, los titulares del Ejército Nacional, Fuerza Aérea Dominicana y Marina de Guerra, además del presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, licenciado Juan Daniel Balcácer, y el responsable de la realización del monumento, el capitán de navío Juan Gilberto Núñez.
Los innombrados
Los monumentos al soldado caído o desconocido hacen justicia a aquellos efectivos de la base de las Fuerzas Armadas, que pierden la vida sin tener nombradía publica ni rangos elevados que les garanticen evitar el casi irremediable olvido que se tiende sobre aquellos de bajo perfil.
La nueva plaza
Se encuentra en la parte frontal izquierda del Ministerio de las Fuerzas Armadas, sustentada con el fondo de un medio arco monumental arquitectónico que le ofrece un sobrio marco en color crema pastel, que permite la ubicación en el centro el pedestal de concreto y piedra sobre el que reposa la estructura del soldado y la bandera.
Está ubicada en un lugar que a partir de la fecha adquirirá la connotación de recinto sagrado. En el centro de esta plaza permanecerá encendida una llama votiva que estará colocada frente a la escultura, como muestra de respeto y devoción al espíritu de sacrificio de aquellos hombres y mujeres que abrazaron la carrera de las armas en su vocación más pura de servicio para entregar sus vidas en pro de mantener las garantías de estabilidad y orden que debe regir toda sociedad civilizada.
La escultura fue concebida pensando en un soldado que abrazó su bandera y aun cuando cayó tendido en la lucha por la libertad de su pueblo, mantuvo en alto este lienzo sagrado, no permitiendo que aún después de su muerte, tocara el suelo. La Bandera Nacional reposa sobre su pecho en muestra del sacrificio al que todo soldado debe estar dispuesto a entregarse en su condición de centinela de la paz y de la democracia.
La historia
La Tumba al Soldado Desconocido es el nombre que reciben los monumentos erigidos por las naciones para honrar a los soldados que murieron en tiempos de guerras sin haber podido ser identificados.
A veces es una tumba simbólica, o cenotafio, evocando, sin referir a sus identidades concretamente individualizadas, a todos los habitantes de un país que murieron en un determinado conflicto. Algunos contienen los restos de soldados fallecidos durante estos acontecimientos.
La tradición moderna de esta práctica la comenzó el Reino Unido cuando, terminada la Primera Guerra Mundial, fue el primer país en enterrar a un combatiente desconocido en nombre de todos los ejércitos del Imperio británico, en la Abadía de Westminster en 1920.
Pero hay fuentes que refieren que el primer memorial conocido es el monumento al Landsoldaten («Soldado de infantería»), erigido en 1849, tras de la Primera Guerra de Scheswig y se montó en Fredericia , en Dinamarca.
El más conocido de esta clase es el memorial del muerto desconocido de la Guerra Civil de los Estados Unidos de 1866.
Un Apunte
Realización
La Plaza, construida a intención del Ministerio de las Fuerzas Armadas y la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, fue realizada por el capitán de navío Juan Gilberto Núñez, al frente de un equipo creativo de la Fundación Luces y Sombras incorporada. Con esta plaza RD se une a las naciones que tienen un lugar sagrado para honrar a esos soldados que mueren en el cumplimiento de su deber.

