“Sabotaje”

Caso confuso

A cada vuelta de tuerca afloran más contradicciones, con su carga de confusión, sobre el “sabotaje” en el sistema del voto automatizado de la Junta Central Electoral que motivó la suspensión de las votaciones municipales del domingo.

En tanto el presidente de la JCE, Julio César Castaños Guzmán, calificó el alarmante fallo como un “caso fortuito”, la Policía no solo ha relacionado al técnico de Claro Manuel Antonio Regalado y al coronel Ramón Guzmán Peralta en una supuesta trama para atentar contra el proceso, sino que ha señalado que en el caso hay “autores principales”.

A ciencia cierta todavía no se sabe lo ocurrido con los equipos que el día de las votaciones no funcionaron. Guzmán Peralta, jefe de seguridad del candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, y Regalado están recluidos en la cárcel del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, pero en las últimas horas la Procuraduría General de la República no había decidido si enviarlos a los tribunales por el supuesto sabotaje. Ambos intercambiaron información sobre supuestos movimientos alrededor del sistema del voto automatizado, en torno a los cuales salió a relucir el nombre del coronel Koji Maruyama.

El caso es que sin contar con una querella ni un expediente de la JCE, la Policía se ha adelantado con una investigación aparentemente sesgada. Las distintas posiciones es precisamente lo que torna más confusa tanto la investigación como el “sabotaje” en sí.