Santiago. Una misa con motivo del 40 aniversario del fallecimiento del expresidente Silvestre Antonio Guzmán Fernández fue realizada ayer en la iglesia Nuestra Señora de la Altagracia de esta ciudad.
En el acto religioso, Carlos Antonio Hernández Guzmán, nieto de Guzmán Fernández, definió a su abuelo como un hombre que brilló por su honestidad, entrega y cariño por el pueblo dominicano.
“Es un honor y un privilegio, aparte de ser una gran responsabilidad pertenecer a esta familia, ser nieto de un hombre que fue tan grande para este país, porque a pesar del tiempo todos los recordamos”, expresó el hijo de la embajadora dominicana en Washington, Sonia Guzmán y hermano del director del Inespre, Iván Hernández Guzmán.
“También es un ejemplo para que esas personas que ocupan puestos sean personas de bien, honestas y hagan bien su trabajo”, indicó.
A la misa, que fue auspiciada por el párroco Agustín Guzmán, asistieron los nietos del exmandatario, Miguel Hernández Guzmán, la esposa de Iván Hernández Guzmán, Bibi Grullón de Hernández, así como algunos bisnietos del extinto presidente.
La embajadora Sonia Guzmán no asistió a la misa porque se encuentra fuera del país, mientras que el director del Inespre, Iván Hernández Guzmán, participó en una ceremonia religiosa similar en Santo Domingo.