Editorial

Recurso del método

Recurso del método

No deja de extrañar el planteamiento del presidente Leonel Fernández en el sentido de que el debate educativo debe comenzar por la metodología de la enseñanza. Esto así habida cuenta de que su señalamiento deja margen para pensar que el sistema se reduce a una simple rutina, que opera sin ningún criterio.

Como conductor de los destinos nacionales el Gobierno es el responsable del modelo de enseñanza, que, por el momento no es lo que está en discusión. Lo que ahora exigen diferentes sectores es, para que el Presidente lo tenga muy en cuenta,  que primero se cumpla con la ley que asigna un 4% del Presupuesto a educación.

Tal vez pueda discutirse, con sinceridad y sin prepotencia, si el porcentaje es mucho o poco para alcanzar las metas que, como planteó el Presidente, pretende todo modelo educativo. Se sabe, de antemano, que el actual sistema no responde a las necesidades de estos tiempos y la mejor muestra son las evaluaciones internacionales.

También, e incluso sería muy saludable, que se discuta lo que se va a enseñar y definir un desarrollo curricular, así como una metodología de la enseñanza, si es que no se ha contemplado en los planes trienales o en los muchos proyectos, pero siempre con el compromiso de aportar los recursos que sean necesarios.

Puede ser muy cierta su observación de que en la actualidad se está en el tránsito de un modelo educativo que estaba centrado en la sociedad industrial en otro dirigido a la era del conocimiento. Lo mismo que su afirmación de que hoy se analiza la conveniencia de pasar de un régimen basado en el maestro a otro enfocado al estudiante.

Sin embargo, en República Dominicana lo que se debate es la necesidad de que se cumplan con las leyes en torno a las cuales se asienta el sistema institucional. Que es a lo que se ha resistido el Presidente, al tiempo de que se autocuestiona con las premisas que cita como base para la discusión del sistema educativo.

Eso  “de qué, cómo y para qué se enseña” son premisas que competen al Gobierno.

El Presidente se distancia de la realidad si entiende que por el hecho de no estar definidas las metas y la metodología de la educación es suficiente el 2.7 del Presupuesto de 2012.

Al demandar la asignación del  4%, se exige que se cumpla con la ley. Pero si el Presidente está dispuesto a discutir la metodología para alcanzar objetivos específicos, estaría muy bien. Lo que no está bien son las condiciones que ha puesto para justificar las violaciones.

El Nacional

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